Cuando los padres formen hijos responsables a nivel social se evitarán muchos problemas, advirtió el vocero de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, al respecto del accidente automovilístico en el que perdieron la vida una familia de peregrinos en la carretera 57, hecho por el que dijo, se debe tomar más conciencia del consumo del alcohol y de la educación de las familias.
En rueda de prensa, Lara Becerril indicó que tras los hechos en los que se han visto involucrados miembros de la peregrinación diocesana al Tepeyac, más que solicitar a las autoridades el endurecimiento de las leyes, se necesita formar personas más responsables, y esto se logra a través de la familia.
“Las leyes están suficientemente claras, la autoridad ha cumplido con todo esto desde luego de dar seguimiento y hacer justicia en estos eventos, tenemos que seguir con este trabajo porque donde está el meollo del asunto, es en la familia, cuando los padres formemos hijos responsables a nivel social esto nos ayudará muchísimo, endurecer las leyes es una salida pero mientras que la libertad humana no esté educada, seguiremos con el problema”, aseveró.
Lamentó que por tercer año consecutivo los peregrinos queretanos se hayan visto envueltos en este tipo de hechos donde el alcohol ha sido el protagonista, por lo que exhortó a la población a no conducir un vehículo cuando hayan consumido bebidas embriagantes, para evitar cualquier accidente.
“Son hechos que tenemos grabados en nuestra mente e historia están relacionados con el alcohol y desde un principio la recomendación social que nos han hecho es que el alcohol no se lleva bien con nada en exceso, pero de manera particular sabemos que estos accidentes han sido fruto de abuso del consumo del alcohol y hay que evitarlo”, refirió el Vocero de la Diócesis de Querétaro.
Por último, destacó que ante estos hechos, desde el año pasado las autoridades civiles por lo menos aquí en Querétaro, han tenido una preocupación muy particular, han hecho esfuerzo muy grande, para mantener la seguridad de las columnas femenil y varonil durante su trayecto hacia el Tepeyac.