La economía formal de Querétaro ha disminuido al pasar de 4.3 a 2.9 por ciento, sostuvo Viridiana Ríos, creadora de Data Coparmex, quien urgió al estado a trabajar en un blindaje de seguridad ya que es una de las variables que determinan los flujos de inversión y los empleos dignos.
Al reunirse con empresarios queretanos alertó sobre el retroceso en el nivel de formalización de la economía lo que en su opinión resulta extremadamente peligroso para el crecimiento de la entidad y regresivo para la calidad de vida de la población.
Explicó que esta baja en la formalización tiene dos razones; la renegociación del tratado comercial y la seguridad.
En este último punto, estimó necesario blindar al estado para que no se contagie de la violencia que ya registran entidades del bajío.
Recordó que hasta hace unos años, era una de las entidades que promovía el crecimiento del país a niveles deseados del cuatro por ciento, pero hoy ya no lo es, ya que incluso por primera vez reporta una tasa negativa del -0.4 por ciento, subrayó.
Dijo que relacionado con la reducción del crecimiento formal está la precarización salarial, un tema que en el caso de esta entidad, consideró es preocupante ya que sólo el 52.3% de las personas con empleo formal tienen un salario por encima de los dos mil 500 pesos que es el ingreso que de acuerdo a Coneval es lo que requiere un individuo para sobrevivir en las zonas urbanas.
Ante empresarios de la Coparmex, puntualizó que es importante atender el blindaje de seguridad ya que hay un incremento en la tasa de homicidios que en 2014 era de 3.7 por cada cien mil habitantes y en 2018 se ha incrementado a 7.7 por cada cien mil habitantes.
Mientras que en robo común la entidad presenta una tasa de 130 robos por cada 100 mil habitantes.
En suma, apuntó “el estado de Querétaro es atípico en muchos sentidos con respecto al país”, ya que por un lado ha logrado un manejo de recursos públicos que aparenta estar controlado, como también su deuda pública, pero también enfrenta retrocesos que tienen que ver con una economía que se está informalizando y que se está precarizando.
Por último, identificó que el mayor reto que tiene Querétaro es lograr incrementar su formalidad y también encontrar una estrategia eficiente a fin de no tener un contagio de la violencia que afecta a estados cada vez más cercanos y un tercer reto que sumó es el relacionado con la corrupción.