Los cinco mil elementos que laboran en las 140 empresas deseguridad privadas con registro estatal ante la Secretaría deSeguridad Ciudadana, se capacitan durante dos semanas antes deejercer esta actividad y de manera general no usan esposas ni armasde fuego ni participan en detenciones, informó el presidente de laUnión de Empresas de Seguridad Privada del estado, Mario AguilarBecerril.

Para el líder de estas empresas, casos como los que sepresentaron en El Mirador son resultado de la participación deciudadanos “a los que se les pasó la mano”, porque loselementos de seguridad privada evitan al máximo realizar unadetención, ya que ese es trabajo de la autoridad estatal.

Explicó que todas las empresas de seguridad privada entregan unprograma de capacitación que debe avalar la Secretaría deSeguridad Ciudadana y se recurre al apoyo de la Cruz Roja, para quelos elementos puedan brindar primeros auxilios básicos y la ayudadel cuerpo de Bomberos, para formarlos en prevención y combatecontra incendios.

Las empresas también se respaldan en otras compañías enmateria de defensa personal para que sepan someter a alguien sincausarle daño, así como conocer el uso correcto del tolete obastón PR-24, de la lámpara y el gas lacrimógeno, pero es raroque alguna empresa les entregue esposas para realizardetenciones.

“Nosotros debemos vitar al máximo detener a una personaporque no es nuestra función, con todo y que somos coadyuvantes dela seguridad, el protocolo es notificar de inmediato a susupervisor y ellos a su vez a la Secretaría de Seguridad para quetome cartas en el asunto”.

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Estimó que lo que sucedió en El Mirador, donde una personaperdió la vida mientras se le sometía, no fue tantaresponsabilidad del elemento de seguridad, sino de los ciudadanosque participaron y “se les pasó la mano” o no sabían cómosometer a alguien.

Por lo contrario, dijo, los elementos de seguridad privadareciben una capacitación de ocho horas diarias durante 16 días,que se dividen en ocho días de aspectos teóricos y el resto depráctica “en el campo de acción”, de manera que si bien “nolos hacemos bomberos o paramédicos, sí saben cómo actuar”.

En el caso del tolete, puntualizó que se les enseña autilizarlo como una herramienta en casos de emergencia y no como unarma para atacar, además que se les brinda capacitación enderechos humanos.

Después de esa capacitación, deben presentarse en laSecretaría de Seguridad Ciudadana donde también se les brinda untaller de inducción para la seguridad privada y se les aplica unexamen para que puedan obtener una credencial en la que se leshabilita como elementos de seguridad.

UN EMPLEO QUE DEMANDA SECUNDARIA

Por ahora sólo 140 empresas tienen registro ante la Secretaríade Seguridad Ciudadana y alrededor de diez o doce no refrendaron supermiso o cuentan con el registro federal para operar.

Por solicitud de quienes contratan la seguridad privada, se pideque los elementos tengan estudios de secundaria y algunossolicitan, específicamente un nivel de preparatoria.

Las edades de los elementos de seguridad privada van desde los18 hasta los 65 años de edad, porque son “empresas socialmenteresponsables” y los salarios que se les pagan oscilan de loscinco mil a los 12 mil pesos mensuales.

“En otros casos, como los escoltas que sí tienen permiso paraportar armas fluctúa entre los 12 y los 20 mil pesos mensuales. Enla unión de empresas le pedimos a nuestros afiliados que la gentedebe trabajar las 48 horas a la semana que exige la Ley Federal delTrabajo y en algunos casos el horario de 48 horas una semana y otrade 60 horas, lógicamente con un ingreso extra”.

Recomendó a la población a solicitar información ante laSecretaría de Seguridad Ciudadana y la Cámara Nacional deComercio (Canaco) sobre el listado de empresas con los debidosregistros estatales.