La Diócesis de Querétaro lamenta el atentado en contra del ex obispo del estado, Faustino Armendáriz Jiménez; en la entidad, afirman, se han presentado cuatro casos de robo con violencia en los últimos 15 años, siendo un sitio seguro respecto a otros estados del país.
"Lamentamos profundamente este acontecimiento, pues se trata de un representante de la iglesia, de un arzobispo, de un líder religioso y lamentamos estos hechos que indudablemente son fruto de la descomposición social", indicó Martín Lara Becerril, vocero de la Diócesis.
Fue el pasado 21 de mayo que al término de la misa de las 12:00, en la catedral de Durango, Faustino Armendáriz Jiménez sufrió un atentado en la Sacristía Mayor, por parte de una persona desconocida. Actualmente se reporta al ex obispo sin ninguna herida y en buenas condiciones físicas.
Además, la Diócesis de Querétaro recordó el asesinato del sacerdote Javier García Villafaña en el estado de Michoacán, situación con la que también dijeron solidarizarse, en un contexto, señaló Lara Becerril, de violencia en el país.
"La sociedad no ha dejado de sufrir, cada atentado, cada extorsión, cada amenaza son lágrimas, es dolor de un pueblo, son pérdidas de las familias y nos unimos a ellos. Lamentablemente la pérdida de nuestros hermanos sacerdotes nos entristece, pero nos anima a seguir luchando en búsqueda de paz".
En Querétaro, añadió, la sensación de inseguridad es mínima, por lo que se han reportado escasos sucesos de violencia, la mayoría relacionadas a extorsiones y robos al interior de las parroquias y las iglesias, sin mayores problemáticas al respecto, ni de niveles de violencia graves.
"En Querétaro ninguno de los sacerdotes nos sentimos perseguidos, no nos sentimos amenazados de muerte, o un clima de violencia más allá de nuestras fuerzas. Lo que ha habido es el tema de extorsión, que es permanente, y los robos a parroquias, pero hasta el momento no se siente en Querétaro un ambiente de violencia contra sacerdotes".
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Sobre las parroquias de la Diócesis pertenecientes a Guanajuato, las cuales son siete, indicó que si bien hubo un "toque de queda" debido a la violencia en el estado, donde las misas se celebraban más temprano, actualmente han vuelto a sus horarios con normalidad.