Con la participación de más de 150 actores en escena, habitantes de Santa María Magdalena viven la representación del viacrucis, considerada una tradición generacional que cumple 102 años.
Bajo los rayos del sol, decenas de familias siguen el calvario de Jesús por las calles de la comunidad, y otras más se reúnen en el atrio de la Iglesia para presenciar los pasajes bíblicos en tres principales escenarios.
Para esta representación que destaca por seguir el libreto original del llamado libro del Mártir del Gólgota, escrito en el siglo XIX, cuenta también con la participación de 50 personas encargadas de la logística.
Por segunda ocasión Emanuel Cruz, mecánico de profesión de 39 años de edad, representa el papel de Jesús en las tres caídas, mientras que en el papel de María participa la señora Rocío.
La representación del viacrucis inició desde las ocho de la mañana con la escena de la aprehensión de los ladrones, donde jóvenes salen corriendo con el comercio hurtado, y son perseguidos por los soldados romanos.