En Tolimán, fieles y turistas atestiguan la Pasión de Cristo

La pequeña plaza de Tolimán lucía abarrotada

por Alejandro Payán Vázquez

  · sábado 20 de abril de 2019

La crucifixión inicia en el cerro del Calvario. YOLANDA LONGINO

La pequeña plaza de Tolimán lucía abarrotada, el poco espacio que había disponible ya estaba ocupado; una jardinera, una esquina o un balcón era suficiente para ver el juicio que empezó a las 10 de la mañana, Poncio Pilatos daba su veredicto, se lava las manos y Jesús iniciaba la sentencia.

El camino de la Cruz inicia, el trayecto de cerca de dos kilómetros es verdaderamente un martirio, casi 300 metros de altura para subir el cerro del Calvario donde año con año se lleva a cabo la representación de la Pasión.

Las lágrimas son reales, cientos de personas acompañan, quienes subieron a pie, hay jóvenes y niños, pero sorprendente también adultos mayores, el camino no es fácil, no hay una brecha, el suelo es de lajas, la mayoría sueltas, todos hacen cuatro o cinco paradas para descansar, los caballos que suben con los soldados romanos vacilan, se detienen, no pueden continuar, no están seguros del camino.

El sol pega con toda su fuerza mientras Jesús de Nazaret, interpretado por Emanuel Zúñiga de 28 años es acompañado por los dolientes, la Virgen María, que es interpretada por Águeda Carolina Gutiérrez llora, cae también un par de veces, el camino de verdad es rocoso y difícil.

Los soldados romanos rasgan las túnicas de Jesús, lo golpean, y empujan, son más de 20 soldados romanos, 40 actores que personifican al pueblo y los dolientes, el grupo de actores destaca por lo colorido de sus ropas en medio del árido cerro.

Acordonan en área de la crucifixión en el cerro, pero la gente se arremolina, el lugar es muy incómodo y reducido, todos intentan subirse para no perderse ningún momento del recorrido, hay gente que escaló las antenas para ver.

La Secretaría de Servicios Públicos del Municipio de Querétaro estima recolectar  61.7 toneladas de basura durante la Semana Santa. /Archivo 

“Ahí está su rey” gritan los soldados romanos, pegan latigazos, a los fotógrafos y reporteros que pasan también, están en su papel mientras los judíos gritaban, “Nosotros no tenemos más rey que el César”, la escena se repite durante diez minutos mientras preparan la cruz.

Ya una vez crucificados Dimas olvida su dialogo, mientras la maestra a cargo de la representación con guion en mano le recuerda la lectura, el sol le pega de frente, está exhausto, se desorienta, los actores improvisan, mientras Gestas le pide a Jesús que se acuerde cuándo esté en su reino.

Foto: Cortesía municipio de El Marqués

Bajan los cuerpos de las cruces, con cuidado, usan escaleras metálicas y se aferran a la escasa seguridad de arneses improvisados, los envuelven en sábanas blancas y los bajan de nuevo por la vereda del cerro, casi dos kilómetros de bajada, la gente resbala y hay quienes caen, una joven se tuerce el tobillo, pide ayuda médica.

Israel De Santiago Núñez, auxiliar de Protección Civil encargado de esta etapa del Viacrucis reportó un aproximado de 600 personas subieron el cerro, el saldo es blanco; solo reportan desmayos y bajas de presión por subir el cerro.

La bajada es más peligrosa y más rápida que la subida, los caballos se sienten inseguros todavía, no saben qué rumbo seguir, los soldados romanos mejor se bajan y los guían a pie.

Ya en el las calles de Tolimán un grupo de personas enfilan su marcha a la iglesia, entran por la parte de atrás, las calles están inundadas de puestos de comida, casi no pueden pasar, cargan las cruces sobre las cabezas de quienes se sientan a comer gorditas, quesadillas o tacos.

Un grupo de jóvenes vestidos de rojo empiezan otra escena tradicional, bailan enfundados en sus trajes de demonios y con máscaras de látex donde representan demonios y monstruos, representan la victoria del mal, no duran mucho hasta que también se retiran, la gente les da dulces o monedas.

En el operativo participaron 71 personas entre bomberos, elementos de Protección Civil y grupos voluntarios, señaló el coordinador de Protección Civil Municipal, Alejandro Vázquez Mellado. ./Hugo Camacho.

Finalmente los más de 80 actores ingresan al templo, todos cansados, asoleados, lo primero que buscan es refrescarse, los devotos empiezan a entrar a la iglesia para dar el pésame a la imagen de la virgen, se forman, se persignan y rezan, esperarán hasta el Sábado de Gloria para la misa que se llevará a cabo que anunciar el ascenso de Jesús al Cielo, la prueba de que trascenderá para seguir tan vigente a casi dos mil años de su partida.