Estalla auge de las clases particulares

Más niños y jóvenes buscan orientación, aunque no siempre aceptan pagar, revelan profesores

Ana Karina Vázquez | Diario de Querétaro

  · domingo 17 de octubre de 2021

Foto: Cortesía | Canuc Kinder

Docentes de educación básica coincidieron en que, durante lo que va de la pandemia, las necesidades y solicitudes de clases particulares y de regularización aumentaron; no obstante, esto no necesariamente se reflejó en el incremento de sus ingresos, puesto que no todas las personas interesadas han podido costear los servicios.

El director de un centro especializado en regularización académica estima los alumnos que reciban un plan especializado que podrían tardar hasta 6 meses en ponerse al corriente.

Foto: Yolanda Longino  | Diario de Querétaro

Tanto Bernabet Rivera y Jessica Smith del Kinder Canuk, como Israel Zúñiga director del Centro de Innovación en Cursos, Regularización y Aprendizaje (CICRA), consideraron que, a pesar de las particularidades de cada caso, es posible identificar un rezago generalizado en la población estudiantil que atienden, principalmente en alumnos de preescolar y primaria.

Zúñiga precisó que, de optar por un plan privado de regularización, los alumnos podrían tardar entre uno y seis meses en alcanzar los conocimientos requeridos para paliar los rezagos que ha conllevado la suspensión de actividades presenciales durante la pandemia.

Durante los primeros meses de la pandemia, madres y padres de familia recurrieron a la búsqueda de asesorías personalizadas para que sus hijos no se atrasaran en los contenidos de sus clases, de acuerdo con Rivera “nunca había visto tantas oportunidades para maestros particulares”.

“La edad preescolar es el momento en el que aprenden a socializar, a tener amigos, a mejorar su lenguaje, si no recibieron una estimulación adecuada en un entorno diferente a su casa”, esta es la principal razón por la que, con el regreso a clases, decidieron abrir el colegio únicamente para actividades presenciales.

De acuerdo con Zúñiga a pesar de que durante la pandemia aumentó el número de padres de familia interesados en clases particulares, hubo un decremento en las atenciones brindadas por la institución, puesto que con la pérdida de empleos y las dificultades económicas, las personas que podían pagar el servicio disminuyeron, inclusive, cerraron definitivamente durante los primeros meses de la pandemia.

Realizaron en este primer mes una evaluación de los estudiantes/Foto: Hugo Arciniga | Diario de Querétaro

El CICRA pasó de tener más de cien alumnos de primaria a reabrir con sólo cinco, ahora, poco a poco, con el regreso a las actividades presenciales en algunas escuelas, los padres de familia se han percatado de la necesidad de regularizar los conocimientos de los niños, tras más de un año y medio sin clases presenciales.

Los tres señalaron que el nivel de rezago dependió mucho de las posibilidades de atención y acompañamiento que los padres de familia brindaron a los niños durante las clases en línea “no todos podían estar con ellos durante las clases por cuestiones de trabajo”, aseguró Zúñiga.

Debido a que sólo algunas personas pueden pagar clases particulares, en el CICRA han planteado la posibilidad de generar planes para grupos pequeños de niños en edad escolar, así, profesores de distintas materias los asesoran, ya sea en sus instalaciones o en sus domicilios.