Las condiciones de estiaje que enfrenta parte del territorio nacional ha traído repercusiones para al menos 500 productores agropecuarios asentados en Jalpan de Serra, pues la pastura no ha crecido lo suficiente para proporcionar alimento a los animales y a esto se le agrega la disminución de los precios del ganado.
Efraín Muñoz, presidente de la Asociación Ganadera local de Jalpan, explicó que los 500 productores agrupados en esta organización, experimenta esta problemática, originada desde el año pasado por la escasez de lluvias.
“Este año, 2019, la precipitación pluvial fue demasiado baja, en 2020 nos viene peor (...) Se nos viene esto muy serio en todos los aspectos, desde el agua, desde la comida que es el forraje y los precios bajos”, estimó.
Muñoz señaló que para enfrentar este problema, se alista la adquisición de pipas de agua y de 60 mil pacas para los miembros de la Asociación Ganadera de Jalpan de Serra; en tanto, para la Sierra Gorda se buscará adquirir 160 mil pacas de alimento para el ganado.
“(Es) posible que esas pacas no vayan a ser suficientes (...) A como nos viene la necesidad, yo pienso que no nos van a aguantar como hasta por marzo, abril y después se nos vuelve a venir el detalle”, alertó.
Subrayó que actualmente se realizan recomendaciones a los productores como vender la mitad del ganado para no gastar tanto en el mantenimiento de los animales; no obstante, dijo, de incrementarse las lluvias en enero y febrero podría recuperarse la situación de los ganaderos.
“Lo recomendable es vender la mitad de ganado y quedarnos con menos cabezas. Ya vendrán tiempos buenos y volveremos a hacernos de más ganado, pero ahorita la estamos pasando bien fuerte y se va a venir más fuerte”, dijo.
A esta situación, explicó, se suman los recortes al campo de esta administración federal y exhortó a las autoridades a no “dejar” a los productores agropecuarios. “Nos tiene totalmente inquietos, totalmente (inconformes) porque, si dejamos de producir el campo, lo que es saludable para nuestra gente, nuestro México, se van a empezar a adquirir productos enlatados, de mala calidad y como consecuencia obesidad, cáncer y diabetes”, apuntó.
PEQUEÑOS PRODUCTORES AFECTADOS
Inocencio López, productor en Ojo de Agua del Lindero en Jalpan de Serra, es propietario de seis cabezas de ganado, y una parcela de ocho hectáreas donde cultiva maíz. Alertó que la falta de lluvia, ha ocasionado que no se acumule agua en los bordos y jagüeyes, es decir, en cuenca donde almacenan el agua.
“Ha estado escasa el agua. No se junta el agua para los animalitos que tenemos en el agostadero y de la pastura, como no llovió, no hicimos siembra para rastrojo (...) tenemos que buscar la manera, sacrificándose uno, de comprar la pastura”, dijo.
DISMINUCIÓN DE PRECIOS
Agustín Pérez, propietario de 13 cabezas de ganado, señaló que también se han registrado bajas en los precios de los animales; ya que, un becerro en promedio se vende a 38 pesos el kilo aproximadamente, mientras que hace dos años, el costo sobrepasaba los 50 pesos; lo mismo sucede con las vacas, dice, cuyo precio está a poco más de 20 pesos.
“Es más pagado un kilo de pollo, que un kilo de vaca (...) Nos ha afectado a todos porque no hay pastura. Este año, ya se acabó la época de lluvias, y el pasto no ha crecido lo que siempre crece”, lamentó.
Afirmó que esta sequía se debe al cambio climático, ya que en abril o junio comenzaba la temporada de lluvias hace algunos años, y actualmente las precipitaciones inician a finales de julio o inicios de agosto. “También (es) la contaminación. Eso perjudica a la capa de ozono y eso no nos beneficia”, alertó.
Nazario Ramírez, productor agropecuario en Jalpan, refirió que la escasez de lluvias se ha presentado a lo largo de todo este año y comentó que, de 15 cabezas de ganado, se quedó sólo con seis para poder mantener a sus animales.
SEQUÍA
De acuerdo con el Monitor de Sequía en México de la CONAGUA, al corte del 30 de septiembre de este año, 12 municipios de Querétaro se encuentran “anormalmente secos”, sin embargo, seis presentan sequía de moderada a extrema; uno se mantiene con “sequía moderada”, tres con sequía severa y dos con “sequía extrema”.
De acuerdo con Gabriel Bastarrachea Vázquez, titular de la Unidad Estatal de Protección Civil del Estado, la presa de Jalpan de Serra está a menos del 50% de su capacidad. Aunque reconoció que este nivel no es habitual para esta temporada del año, todavía está en un nivel “no crítico”.
El Sistema Nacional de Información del Agua, monitoreo de las principales presas de México, realizado por la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), reveló al corte del 15 de octubre, que la presa Constitución de 1917, localizada en San Juan del Río, tiene un nivel de aguas máximas ordinarias (NAMO) de 66.08 hectómetros cúbicos (hm3), sin embargo, actualmente está a 5.98 hm3.
En el caso de El Centenario, localizada en Tequisquiapan, tiene un almacenamiento actual de 2.47 metros cúbicos de una capacidad de 9.78 hm3 y en San Ildelfonso, de una capacidad de 47.81 hm3, su almacenamiento actual está en 1.56 hm3. La Llave y La Venta, en San Juan del Río y Pedro Escobedo respectivamente, registran según la CONAGUA .00hm3 actualmente.
CAMBIO CLIMÁTICO, OCASIONA SEQUÍA
Roberto Pedraza Ruiz, integrante del Grupo Ecológico Sierra Gorda, alertó que el bajo nivel en cuerpos de agua, como la presa de Jalpan, es una consecuencia del cambio climático, y que, de acuerdo con datos de la Conagua, es el segundo año más seco en México desde 1953.
Indicó que ante la sequía, es recomendable acopiar la mayor cantidad de agua de lluvia y proteger los bosques. “El cambio climático ya está encima de nosotros”, advirtió.
Explicó que la escasez de agua, además de afectaciones al sector agropecuario, también ocasiona problemáticas sociales y al respecto, ejemplificó que en Centroamérica se registró una migración masiva, que aunado a la inseguridad, también inició por los pequeños agricultores que no resistieron la falta de cosecha.
“Tengamos muy presente que el cambio climático no es rollo. Esto es un efecto de…”, puntualizó.