Miles de mujeres participaron en la protesta este 8 de marzo, para exigir el cese a la violencia de género y los feminicidios; de acuerdo con cifras de la Unidad Estatal de Protección Civil, se registraron más de 10 mil asistentes a la manifestación.

Antes de las cuatro de la tarde, las mujeres, con pañuelos verdes, vestidas de morado y negro, se dieron cita en Plaza Constitución, para marchar rumbo a avenida Zaragoza. A lo largo del trayecto, con el ritmo de los tambores, las mujeres externaban consignas como: “yo si te creo”, “Ni una más” y “Gobierno panista, homofóbico y machista”.

A la altura del tanque, las mujeres retomaron esta vialidad para incorporarse al centro histórico, a la plaza Constitución. Durante su recorrido, a lo largo de la avenida, destacaban las pancartas y los rostros pintados de morado; esto al hacer referencia a la violencia que experimentan las mujeres.

“Estamos hartas compañeras. Ya no somos indefensas”, expresó una de las manifestantes en Plaza Constitución, mientras miles de mujeres se congregaban alrededor de la fuente y llenaban las calles aledañas.

A la altura del tanque, se marcó la leyenda “Estado feminicida”, y en plaza Constitución se lee: “Esto se limpia, ¿a mis hermanas quien me las devuelve?”

Una joven, desnuda y cubierta de pintura roja, relató una de sus experiencias, mientras las mujeres gritaban: “yo si te creo” y, sus compañeras la rodeaban con abrazos.

Al centro de la fuente, una de las manifestantes, hizo un llamado a quienes no forman parte de los movimientos feministas para que no los tomen como “una moda”. “No está financiado por intereses oscuros. El movimiento feminista data de más de 160 años y surge de las demandas de mujeres trabajadoras”, agregó Beatriz Espíndola, representante de Feminismo para Todas.

“Gracias a las luchas de reivindicación de nuestros derechos, por parte de nuestras ancestros, hemos conseguido y conquistado los derechos que ahora se reconocen, a la educación, al trabajo remunerado, a la participación y representación política”, subrayó.

Mientras se desarrollaba la protesta en plaza Constitución, otro grupo de mujeres se plantaron afuera de Palacio de Gobierno para externar su rechazo a la violencia. Con las puertas cerradas de la Casa de la Corregidora, una de las manifestantes externó: “Ya no necesitamos la legitimación de nadie para exigir lo que por derecho se nos ha negado”.