Sin llegar a ningún acuerdo terminó la primera audiencia conciliatoria entre el periodista Adán Olvera y el alcalde de Colón, Alejandro Ochoa Valencia, como parte de las medidas del nuevo sistema de justicia y en torno a la acusación del comunicador por amenazas en su contra.
Al concluir el careo, el periodista que establó la acusación dijo que teme por su integridad física porque Ochoa confesó ante la autoridad que el día del altercado iba acompañado por dos choferes armados pagados por el municipio de Colón, a quienes ordenó vigilarlo de cerca.
“Me estuvieron checando (los choferes) todo el tiempo que estuve en el restaurant, me estuvieron vigilando y él se sintió amenazado por un teléfono celular con el que dice (Ochoa) que le dijeron que yo lo estuve grabando. Después de eso fue cuando me dijo que si yo me sentí ofendido por que sus choferes armados me estuvieron vigilando que me ofrecía una disculpa, evidentemente le dije que yo se lo agradecía, pero que sí temo por mi seguridad”, declaró Adán Olvera.
Por su parte, Alejandro Ochoa Valencia sostuvo que no hubo ninguna disposición a solucionar al conflicto por parte del comunicador. “No se dieron las condiciones, yo vengo con toda la disposición, pero el ciudadano Adán pidió que no llegáramos a ningún acuerdo, no viene con la disposición de acordarlo”, expresó.
Al no alcanzarse un acuerdo, la carpeta de investigación será devuelta a la Fiscalía General del Estado para concluir la investigación y presentarla ante un juez.
Los hechos que motivaron la denuncia se dieron el 8 de marzo en un restaurante de la capital queretana, donde el alcalde panista de Colón, que iba acompañado por escoltas y choferes armados, fue a la mesa del comunicador para amenazarlo de que “te voy a partir la madre”, por lo cual Odán Olvera presentó una denuncia ante la Fiscalía estatal y ante la Fiscalía General de la República, además de una alerta ante el mecanismo de protección a periodistas de la Secretaría de Gobernación.
Por último, el comunicador relató ayer que en la comparecencia ante el facilitador, ochoa Valencia dio a entender la denuncia del periodista era con fines de “un asunto de dinero” y que por esa afirmación no es posible un acuerdo.
“Sus disculpas salen sobrando, porque continúa con las amenazas y continúa además declarando reiteradamente que yo miento y dice que yo necesito publicidad”, concluyó el periodista.