Hasta cuatro kilogramos engorda un queretano durante las festividades de fin de año y en el caso de las personas que ya tienen enfermedades crónico degenerativas pueden presentarse situaciones de gravedad que ponen en riesgo su vida, advirtieron, por separado, el Colegio de Nutrición del estado y la delegación estatal del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Se estima que cada persona sube entre el dos y el tres por ciento de su peso corporal durante las festividades de fin de año. La presidenta del Colegio de Nutriólogos del estado, Guadalupe Cervantes Mejía, precisó que esto significa de dos hasta cuatro kilos por los excesos que se cometen y porque las cenas son muy calóricas.
“El incremento de peso se debe tanto al número de porciones, porque nos servicios más de lo que acostumbramos y también porque son alimentos con más contenido calórico, quienes comen carne roja pues es más pesado por el contenido graso, el pollo o el pavo son más ligeros, pero varían las porciones: terminamos comiendo más de lo debido”, explicó Cervantes Mejía.
La edad es un factor en contra. A partir de los 30 años el metabolismo sufre una ligera disminución y si se mantienen los hábitos de alimentación de la adolescencia, es casi seguro que se aumentará el peso, por lo que es necesario cuidar lo que se come y mantenerse activos.
En el caso del ISSSTE, los derechohabientes suben del 2 al 3 por ciento, lo que los pone en riesgo. El delegado Sergio Blanca detalló que esto es más peligroso para una población de mayor de edad, como la población del ISSSTE local: el nueve por ciento de los derechohabientes queretanos del Instituto son diabéticos y hasta el 14 por ciento del total presenta hipertensión.
“Hemos tenido ingreso estos días de ocho personas con descompensación en su organismo, uno con coma diabético y otros con un nivel de glucosa que pone en riesgo su estilo de vida y otros con hipertensión arterial por comer alimentos salados que puede ocasionar un infarto agudo al miocardio o un accidente vascular cerebral”, insistió Sergio Blanca.
Para Guadalupe Cervantes lo más importante es que se recurra a los expertos para controlar el peso, porque de otra manera se puede caer en las vías rápidas o caminos fáciles que no son sanos ni seguros, como las dietas y productos milagrosos que sólo dan resultados por uno o dos meses.
“Es una promesa que nos hacemos cada año, subimos de peso en las fiestas, al año siguiente prometemos bajar de peso y no lo hacemos y se van acumulando los kilos de más, no es bueno automedicarse ni recurrir a dietas milagrosas sino acudir a expertos, porque no hay ningún producto ni medicamento avalado que sea eficiente”, advirtió la presidenta del Colegio de Nutriólogos.