Querétaro se ubica como la sexta entidad federativa con la mayor alza de precios de los productos de la canasta básica, de acuerdo con el sondeo de mercado del 15 abril al 15 de mayo dado a conocer por la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec).
El sondeo aplicado en 38 productos de la canasta básica reporta a Querétaro junto con Nuevo León, Tlaxcala, Guanajuato, Estado de México, Hidalgo y CDMX como las entidades federativas que más recienten alzas de precios.
Los productos de la canasta básica con los principales incrementos son el jitomate con el 86.67%, en chile 72%, limón con 57.89% y tomate 57.14%, seguido con el 50% de la naranja, mientras que el precio del aguacate se elevó 34.62%.
Para enseguida ubicarse la cebolla con el 30%, papa y tortilla 25%, además del frijol 14.29% y huevo 5.56, entre otros.
De acuerdo con la asociación, esta huella alcista de precios evidencia el golpe al poder adquisitivo de los consumidores, fenómeno que a decir del gobierno será controlado en los próximos meses, a más tardar septiembre.
Las autoridades han dejado entrever con esta postura que para ellas este es un problema transitorio, coyuntural y manejable; en otras palabras, están relativizando el impacto de la inflación en la economía popular.
“Esta postura gubernamental agrava más la situación, para todo fin práctico están optando por dejar que sean las fuerzas del mercado las que ajusten los precios. Más allá de la narrativa gubernamental y sus floridos adjetivos nos debe llamar la atención la frivolidad con la que están manejando esta situación”, afirmó Cuauhtémoc Rivera, presidente de Anpec.
Aseguró también que muchos hogares están saliendo adelante gracias a las remesas que envían de Estados Unidos, mismas que ascienden a 836 mil 640 millones de pesos anuales, 70 mil millones de pesos mensuales, que equivale a recibir entre 7 y 14 mil pesos.
Finalmente, Anpec, insistió en la necesidad de poner en marcha políticas públicas eficaces que amainen los efectos de la inflación en la población más vulnerable y agregó que el factor estacional de la sequía, el incremento de los energéticos, la lenta reactivación económica, la amenaza de la pandemia aún vigente, así como la caída del poder adquisitivo constituyen un coctel amargo que indica que la inflación seguirá elevándose durante el 2021 al menos.