La Diócesis de Querétaro lamentó los hechos ocurridos el pasado 5 de septiembre, donde una menor de edad fue víctima de feminicidio, ante un acontecimiento que perjudica a un sector vulnerables como son los jóvenes, en lo que consideraron es una pérdida de respeto a la dignidad y vida humanas, reflejo de la sociedad en la que se vive.
"Nos entristece, lamentamos mucho que se sigan violentando a los seres humanos y en especial a las mujeres. Es realmente ver que estos feminicidios ahora tocan una parte muy sensible de la sociedad como son los jóvenes", declaró el vicario de la Diócesis, Martín Lara Becerril.
Añadió que estas situaciones son un reflejo de lo que ocurre a nivel social, donde afirmó hay una pérdida de los valores fundamentales como el respeto a la dignidad y vida humanas, por lo que es preciso tomar acciones al respecto, principalmente en el ámbito familiar con la educación de los niños, adolescentes y jóvenes.
Asimismo, la Iglesia Católica se dijo solidaria con las familias tanto de la víctima menor de edad, Valentina, como con la del presunto joven agresor, refiriendo que ambas atraviesan un momento doloroso, por lo que mandaron oraciones.
"Nos sentimos muy solidarios con las familias de ambos porque, por parte de la jovencita, que es perder un hijo, es muy triste. Y también, aunque este joven presunto agresor, las familias de ambos atraviesan por un momento doloroso. Nuestra cercanía y una oración por el descanso eterno de esta jovencita y oraciones por las familias de ambos jóvenes".
Sobre estos actos de violencia Lara Becerril invitó a los padres de familia a mantenerse cercanos a sus hijos y fortalecer la educación de los valores, pues si bien en la escuela se adquiere cierto aprendizaje, es en la familia de donde proviene el núcleo principal de esta educación.
"La escuela nos ha informado de muchas cosas, y es parte de su papel, pero la familia sigue siendo la cuna donde se forjan, se forman y fortalecen todos los valores humanos y sociales. También creo que es necesario en las escuelas volver a la clase de ética y civismo que son una formación especial en este tipo de valores para fortalecer el tejido social".
Finalmente, mencionó que es necesario que como sociedad haya un involucramiento en estos temas, donde refirió hay preocupación debido a que en este caso estuvieron implicados jóvenes, quienes, dijo, son el futuro de la sociedad y de la Iglesia Católica, por lo que su agravante es más profundo.