El padre Lázaro Moreno celebró su quincuagésimo año como peregrino a pie al Tepeyac, un hito que marca su constancia y profunda devoción. Desde los siete años, Moreno ha participado fielmente en este evento anual, una tradición que no solo ha fortalecido su fe, sino que también lo inspiró a seguir el camino del sacerdocio.
En una reciente entrevista, el padre Lázaro describió su labor actual en el templo expiatorio Carmelita en Querétaro, donde se encarga de la oración eucarística y coordina varios movimientos de adoración. Explicó que, además de su rol en la iglesia, ha mantenido una participación activa en la peregrinación al Tepeyac desde su infancia.
“Yo estoy encargado de la oración nocturna, grupo de la oración eucarística, en el templo expiatorio Carmelita. Mi trabajo es promover la adoración de Jesús Eucaristía, con la cofradía del Santísimo Adoradores de Día y la cofradía Nocturna de Adoración Nocturna. Tenemos varias capillas de adoración perpetua y 20 movimientos en Querétaro”.
El padre Lázaro relató que, a lo largo de los años, ha acompañado a grupos en la peregrinación y ha desempeñado diversas funciones relacionadas con la animación litúrgica y el acompañamiento espiritual. Su dedicación a la fe y a la peregrinación ha sido constante, influenciada por el entorno familiar y su experiencia en el seminario.
“Empecé a venir en 1973, a los 7 años caminé. La semana pasada cumplí 58. Me vine de 7 años, un solo año perdí. Gracias a Dios, en el seminario, vine a la pastoral juvenil y aquí toda mi etapa de seminario la pasé viniendo y apoyando la columna".
Originario del barrio de San Francisquito, Moreno mencionó que su familia también está involucrada en la peregrinación, reflejando un legado de devoción que se ha transmitido a través de las generaciones. El sacerdocio, afirmó, le permitió seguir los pasos de los padres peregrinos que conoció en su juventud y ofrecer apoyo a la comunidad como un pastor guía.
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“He tenido la experiencia de que me buscan, me tienen confianza. Me toca la tarea de la animación litúrgica, acomodo de grupos, animar celebraciones, dar cápsulas de temas y de celebración, la confesión, el acompañamiento de grupos".
El padre Lázaro también destacó su experiencia de 28 años en San Juan de los Lagos, otra importante ruta de peregrinación en su vida. Su compromiso con la peregrinación al Tepeyac y su labor pastoral siguen siendo una parte integral de su vida, evidenciando una trayectoria de devoción y servicio continuo.