Entre los países en paz, México es donde se mata más gente,afirmó el Nuncio Apostólico de México, Franco Coppola, alrespecto de la situación de violencia que atraviesa la nación yque dijo, tiene que ver con una desarticulación de la sociedad yuna ausencia del estado.
En rueda de prensa, el prelado señaló que para solucionar estasituación, que incluso ha alcanzado a la propia Iglesia católica,se necesita fortalecer el tejido social, así como tener unapresencia más fuerte del estado, quien debe garantizar laseguridad a la población.
“El crimen organizado aprovecha de la desarticulación de lasociedad, del hecho de que cada uno se siente solo, y aprovecha dela ausencia del estado, entonces para ganar esta lucha habría quefortalecer el tejido social, ahí regresamos al discurso de lafamilia y una presencia más fuerte del estado que dé seguridadaquí en México”, subrayó Coppola.
Destacó que mientras el crimen organizado cuente con aliadosdentro del gobierno, se sentirá invencible, es por ello que paraganar esa lucha se necesita contar con personas responsables alfrente de los puestos públicos, lo cual se logra con unidad detodos los mexicanos.
“Claro que si la política se hace corromper y no combate, nolucha contra el crimen, va a ganar; pero si ponemos al frente denuestros asuntos políticos personas responsables que no sonsujetas a la corrupción, claro que se puede ganar, es una batallaque se puede ganar unidos, eso es el secreto hay que estar juntos,desafortunadamente en esos lugares donde la gente es matada esdonde la gente se queda aislada, sola, en el momento que se quedasola la mata”, comentó.
A punto de cumplir un año de ser el representante del Vaticanoen México, el Nuncio Apostólico consideró que así como el paístiene grandes posibilidades, calidades humanas de fe, sabiduría ydesarrollo, existen también contradicciones que no son aceptables,como el hecho de que cada cuatro días una persona muere de hambre,es algo en lo que se debe de trabajar, no sólo a través de la fe,sino por medio de las instituciones, en conjunto.
Franco Coppola expresó que a su llegada a México lo que másllamó su atención es que en un país donde el 80 por ciento escatólico, a nivel político esta fe y devoción no está presente,por lo que los representantes no se preocupan también porconsultar y trabajar con el pueblo.
“A nivel político de los que profesionalmente deberíantratar de conseguir el bien común, hay una presencia muy escasa decatólicos, casi no se ve, hay personas lo poco que he visto, hayalgunas pero muy pocas, no es nada representativo, por otro lado,hay que estar muy atentos y no sirve de nada si no se trabaja conel pueblo, sino se construye ese espíritu de familia en el pueblomexicano, es una realidad, un político tendría que ser un líder,que tiene su idea y trata de realizarlas, desafortunadamente muchospolíticos son los que miran sus ideas conforme a lo que dicen lasencuestas, las redes sociales, en vez de guiar a sus ciudadanos”,concluyó.