La Diócesis de Querétaro refirió que por el modus operandi con el que atacaron a los dos policías que perdieron la vida en Lomas de Casa Blanca, parecería tratarse de un asunto relacionado al crimen organizado, sin embargo, mencionó que habrá que esperar las indagatorias de la Fiscalía General del Estado para determinar lo ocurrido.
"Por el ambiente general pareciera que es así. Pero ya las indagatorias nos dirán de qué se trata. El modus operandi pareciera, aunque la Fiscalía y las investigaciones tendrán que decirnos el resultado final, porque no sólo el crimen organizado opera así, pues hay organizaciones pequeñas que también defienden algo", detalló el vocero de la Diócesis, Martín Lara Becerril.
Detalló que Querétaro "no es una isla" apartada de lo que sucede a nivel nacional, en donde el crimen organizado ha aumentado su presencia en distintos estados, creándose un foco rojo entre la violencia de estos grupos delictivos aunado al incremento en el consumo de sustancias nocivas en México.
"La seguridad en México no es muy buena, los focos rojos siguen siendo rojos; Guerrero, Michoacán, hacia el norte en Sonora y algunos otros como ahora Veracruz. Querétaro no es una isla; esta es por un lado, y tenemos un ambiente complicado a nivel general".
Asimismo, refirió que las personas que atacaron al par de policías que custodiaban un domicilio tenían conocimiento de cómo operar, además de indicar que la Iglesia Católica en el estado se une al dolor de las familias de estos policías, reconociendo la dedicación a su labor por proteger a la ciudadanía en la entidad.
"La policía está preparada para la reacción, pero los delincuentes estudian todos los detalles; sabían que la cara no la tenían cubierta, detalles con los cuales atacaron, fue un ataque premeditado. Si es una casa que la Fiscalía había encargado a municipio su custodia no sabemos exactamente la razón por la que se encargó; las indagatorias irán dando lo que hay de fondo".
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El vicario comentó que el crimen organizado se ha fortalecido, extendiéndose por todo el país e hizo hincapié en el consumo de drogas, el cual ha llegado a un alto sector de la población, principalmente de adolescentes y jóvenes.
"¿Qué hay que hacer? Tenemos una responsabilidad social muy grande. De ordinario nosotros, cuando estas cosas suceden, cargamos el acento a las autoridades y tienen su responsabilidad, pero indudablemente estos delincuentes nacieron en una familia, son parte, crecieron en una. La sociedad civil tenemos una responsabilidad grande".
