Cinco años y dos obispos después de haberse presentado el render de la nueva catedral, la Diócesis de Querétaro no tiene dinero para su construcción y ahora el proyecto depende de las aportaciones de la feligresía.

A decir de su vocero, Martín Lara Becerril, el cambio de obispo en la entidad y la pandemia de Covid-19 impidieron que este proyecto se llevara a cabo, quedando únicamente como anteproyecto, aunque con el terreno adquirido.

"Después de la pandemia decidimos que la construcción iba a quedar en reposo, dado que quien tiene que construir la catedral, diríamos básicamente son los feligreses y después de salir de la pandemia no es un momento oportuno".

Y es que, fue en el periodo de Faustino Armendáriz que dicho proyecto se propuso, donde se hizo una convocatoria para despachos de arquitectura, donde resultó ganador Arquitectura Cúbica.

Sin mayor avance, el terreno aún se encuentra en posesión de la Diócesis de Querétaro, localizada en la zona de Centro sur, por avenida Fray Luis de León, en una de las zonas con mayor plusvalía de la capital queretana.

"El terreno es propiedad de la Diócesis de Querétaro, no está en venta, no intentamos venderlo, pues la vocación para lo cual se adquirió fue para la catedral. Está el terreno y de lo que yo tengo de datos nadie ha hecho una oferta de comprarlo".

Dicho lote, entonces, seguirá sin ningún cambio hasta que la Diócesis retome la catedral con el apoyo de los feligreses, sin precisar, pero afirmando que luego de la situación que se vivió durante tres años, en materia económica y mental para las personas, es preciso esperar.

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"Un preproyecto siempre se hace sujeto a muchas modificaciones. Nosotros nos quedamos a ese nivel, donde se dieron únicamente los criterios a nivel arquitectónico y estructural, y en eso nos quedamos".