/ jueves 16 de noviembre de 2017

Iglesias clientes del hampa

En lo que va del año la Iglesia católica ha sufrido 10 robos a sus templos y capillas de los municipios de la zona metropolitana, señaló el vocero de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, quien dijo que el más reciente se registró la noche del martes en la Capilla de El Cerrito, inmueble que en menos de 15 días ha sido objeto de los delincuentes.

Señaló que en la mayoría de los casos se trató de robo de dinero y artículos como custodias y copones, además de la violencia ejercida hacia el párroco de San Pedro La Cañada, lo que pone de manifiesto que la Iglesia no está exenta de la inseguridad y significa que se han rebasado los límites de la conciencia humana.

“Efectivamente a lo largo de este año yo tengo detectadas en este momento 10 lugares donde ha habido un acto de robo, entre ellas quiero destacar lo acontecido en la parroquia de La Cañada, que no solamente fue un robo, sino que fue con violencia, ningún robo es grato pero en este caso fue con violencia hacia el sacerdote, entonces no sólo se sustrajeron cosas”, mencionó Lara Becerril.

Destacó que además de la pérdida material, que no ha sido de consideración, la semana pasada en la comunidad de Santa Cruz Nieto en San Juan del Río, sustrajeron el Sagrario y el Copón con las hostias consagradas, acto que dijo además de ser un ilícito también es un sacrilegio, por lo sagrado de los objetos que se llevaron.

El vicario General de la Diócesis informó que dichos objetos ya fueron encontrados, sin embargo, esto habla de la vulnerabilidad de las iglesias y de la dificultad que se asume al llevar a cabo dichos robos, toda vez, que se trata de un delito del orden federal.

“Hay que decir que el hecho de que se entre a una iglesia a robar, claro que tiene un grado de dificultad, al ser las iglesias propiedades federales se convierte en tema federal, ya no es algo local, sino algo federal, desde el punto de vista de una conciencia ciudadana y religiosa”, apuntó Martín Lara Becerril.

Ante estos hechos, el vocero de la Diócesis queretana destacó que seguirán trabajando en el tema de la seguridad, esto a través de la catequesis entre las familias, jóvenes, adolescentes y niños, además de tener un diálogo permanente con las autoridades estatales y municipales para tener una coordinación específica.

“Desde luego que ya estamos en diálogo con las autoridades para que se atienda el tema y hagamos una sinergia común por la seguridad de nuestras iglesias, es decir, los sacerdotes como custodios la sociedad civil y los cristianos católicos como propietarios de una herencia cultural y espiritual y las autoridades civiles como su responsabilidad, como parte de su servicio social”, agregó.

Martín Lara Becerril reconoció que se han hecho algunas denuncias por los hechos, sin embargo, dijo que mantendrá comunicación con los sacerdotes para hacer lo necesario y evitar que esto siga sucediendo.

Por último, afirmó que los sacerdotes también han sido objeto de extorsiones telefónicas, las cuales se hacen con el conocimiento de causa de su condición religiosa, manejando temas específicos que la Iglesia católica maneja.

“En cuanto a las extorsiones, los sacerdotes me han informado que han recibido llamadas para extorsión, sí se han dado también pero con conocimiento de causa, porque son encaminadas a cosas concretas de la Iglesia y temas que manejamos dentro de la Iglesia; si se han recibido y en este tema decir que el sacerdote y todos los ciudadanos estamos inmersos en el devenir social y no estamos exentos de todas esta cosas”, concluyó.

En lo que va del año la Iglesia católica ha sufrido 10 robos a sus templos y capillas de los municipios de la zona metropolitana, señaló el vocero de la Diócesis de Querétaro, Martín Lara Becerril, quien dijo que el más reciente se registró la noche del martes en la Capilla de El Cerrito, inmueble que en menos de 15 días ha sido objeto de los delincuentes.

Señaló que en la mayoría de los casos se trató de robo de dinero y artículos como custodias y copones, además de la violencia ejercida hacia el párroco de San Pedro La Cañada, lo que pone de manifiesto que la Iglesia no está exenta de la inseguridad y significa que se han rebasado los límites de la conciencia humana.

“Efectivamente a lo largo de este año yo tengo detectadas en este momento 10 lugares donde ha habido un acto de robo, entre ellas quiero destacar lo acontecido en la parroquia de La Cañada, que no solamente fue un robo, sino que fue con violencia, ningún robo es grato pero en este caso fue con violencia hacia el sacerdote, entonces no sólo se sustrajeron cosas”, mencionó Lara Becerril.

Destacó que además de la pérdida material, que no ha sido de consideración, la semana pasada en la comunidad de Santa Cruz Nieto en San Juan del Río, sustrajeron el Sagrario y el Copón con las hostias consagradas, acto que dijo además de ser un ilícito también es un sacrilegio, por lo sagrado de los objetos que se llevaron.

El vicario General de la Diócesis informó que dichos objetos ya fueron encontrados, sin embargo, esto habla de la vulnerabilidad de las iglesias y de la dificultad que se asume al llevar a cabo dichos robos, toda vez, que se trata de un delito del orden federal.

“Hay que decir que el hecho de que se entre a una iglesia a robar, claro que tiene un grado de dificultad, al ser las iglesias propiedades federales se convierte en tema federal, ya no es algo local, sino algo federal, desde el punto de vista de una conciencia ciudadana y religiosa”, apuntó Martín Lara Becerril.

Ante estos hechos, el vocero de la Diócesis queretana destacó que seguirán trabajando en el tema de la seguridad, esto a través de la catequesis entre las familias, jóvenes, adolescentes y niños, además de tener un diálogo permanente con las autoridades estatales y municipales para tener una coordinación específica.

“Desde luego que ya estamos en diálogo con las autoridades para que se atienda el tema y hagamos una sinergia común por la seguridad de nuestras iglesias, es decir, los sacerdotes como custodios la sociedad civil y los cristianos católicos como propietarios de una herencia cultural y espiritual y las autoridades civiles como su responsabilidad, como parte de su servicio social”, agregó.

Martín Lara Becerril reconoció que se han hecho algunas denuncias por los hechos, sin embargo, dijo que mantendrá comunicación con los sacerdotes para hacer lo necesario y evitar que esto siga sucediendo.

Por último, afirmó que los sacerdotes también han sido objeto de extorsiones telefónicas, las cuales se hacen con el conocimiento de causa de su condición religiosa, manejando temas específicos que la Iglesia católica maneja.

“En cuanto a las extorsiones, los sacerdotes me han informado que han recibido llamadas para extorsión, sí se han dado también pero con conocimiento de causa, porque son encaminadas a cosas concretas de la Iglesia y temas que manejamos dentro de la Iglesia; si se han recibido y en este tema decir que el sacerdote y todos los ciudadanos estamos inmersos en el devenir social y no estamos exentos de todas esta cosas”, concluyó.

Local

Urgen legislar sobre el turismo sexual infantil: Palacios Kuri

Presenta la diputada federal por Querétaro iniciativa para coordinar trabajo con hoteles y restaurantes; asegura que esta entidad no es foco de alerta

Policiaca

Muere trabajador tras explosión en Calamanda

La persona que realizaba el llenado del tanque del montacargas resultó con quemaduras

Local

Autoridades capitalinas mantienen diálogo con artesanos

Diariamente se realizan en promedio 15 retiros de comerciantes ambulantes en el primer cuadro de la ciudad

Local

Ciclistas piden a Macías mejora en 10 vialidades

Las propuestas incluyen infraestructura segura para peatones y ciclistas, así como la interconexión de redes de movilidad

Local

Acción Nacional es fuerte con finanzas sanas y militancia capacitada: Mejía

Durante la entrega del comité estatal, Leonor Mejía deseó éxito al nuevo presidente panista Martín Arango y a Iris Alafita, secretaria general del partido

Local

Marcharán por los derechos de las personas con discapacidad

Buscan sensibilizar a la población sobre la importancia de construir una sociedad más inclusiva y accesible