Entre 2.5 y 2.9% crece anualmente la mancha urbana de Querétaro, que se ubica entre las 10 ciudades que más se expanden en el país.
De acuerdo a ONU Hábitat, el crecimiento regular de una ciudad media anual es consumir 150 hectáreas de suelo no urbanizado; sin embargo en Querétaro se han hecho modificaciones en los últimos 10 años de más de 24 mil hectáreas de suelos agrícolas y de preservación ecológica y los suelos se han transformado a habitacionales, industriales y comerciales, comportamiento que ha llevado tener alrededor de un 25% de la mancha urbana vacía.
De acuerdo con información del Consejo estatal de Población (Coespo), en Querétaro hasta la primera mitad del 2019 sumaban 2 millones 234 mil 112 personas, de esta población total y en declaraciones de la presidenta de la Comisión de Desarrollo Urbano, Obras Públicas y Comunicaciones de la LIX legislatura local, Abigail Arredondo, el 80% habita en las dos zonas metropolitanas que comprende a los municipios de Querétaro, El Marqués, Corregidora, Huimilpan, Colón además de San Juan del Río y Tequisquiapan.
CRECIMIENTO EXPONENCIAL
Gabriel Ballesteros Martínez y Sergio Camacho Hurtado, maestro en Arquitectura y nuevo Urbanismo y el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles del estado de Querétaro, respectivamente, ha sido exponencial el crecimiento de la mancha urbana en la última década tanto por crecimiento propio de la población como el fenómeno migratorio y un dinamismo constante de nuevos polos habitacionales como desarrollos industriales y de servicios que finalmente se ven reflejados en la movilidad.
El problema es que por el crecimiento expansivo hoy “tenemos 25% de la ciudad vacía, pero tener ese porcentaje de la ciudad ya urbanizada vacía y el hecho de que nos sigamos expandiendo es contracíclico; es lo contrario a lo que se debería de hacer”, afirmó Ballesteros Martínez.
Al recordar que “Querétaro está en una condición de ser una ciudad que se expandió de forma desordenada por la falta de un Plan de Desarrollo Metropolitano. Lamentablemente hace ya seis años el Instituto Metropolitano de Planeación que se había vislumbrado entre los cuarto alcaldes de la zona nunca se ejecutó, nunca se institucionalizó la planeación metropolitana”.
DEFORMACIÓN DE LA MANCHA URBANA
Expuso que en los últimos 12 años cada presidente municipal y cada ayuntamiento han tomado la decisión en relación a su territorio, pero sin tomar en consideración los efectos de sus decisiones en las demarcaciones conurbadas, situación que se refleja en la expansión y deformación de la mancha urbana por los cambios de uso de suelo, como también problemas de conectividad y movilidad metropolitana, este último tema en su opinión con pasos “tímidos”.
“Se va deformando la mancha urbana al punto de que van haciendo una especie de araña; es decir, está el centro y luego son corredores urbanos hacia todos los vientos, pero en realidad son corredores lineales y eso no es hacer ciudad porque luego hay que conectar todas esas patas de la araña con infraestructura de cabecera que es muy cara”.
Lo anterior, tanto en el tema hidráulico como eléctrico, sanitario y de agua potable, incluso en este último, dijo que dado el crecimiento de la metrópoli para atender la demanda del vital líquido se tendría que prever una nueva fuente de abastecimiento de la envergadura del Acueducto II.
MOMENTO DE CORREGIR
Para Sergio Camacho Hurtado, del Colegio de Ingenieros Civiles, estamos en un momento de corregir el desarrollo exponencial de Querétaro y en particular de la zona metropolitana.
Recordó que años atrás el modelo de desarrollo de Querétaro se enfocó en baja densidad y expansivo derivando en desarrollos cada vez más lejanos e implicando altos costos para dotarlos de servicios como de movilidad, por lo que en su opinión es necesario impulsar la redensificación del desarrollo urbano.
En este tema cabe citar que para especialistas participantes en el Foro Intergremial Querétaro Planeado, el modelo actual expansivo y fragmentado del crecimiento de la Ciudad y su zona metropolitana resulta insostenible.
PROPUESTAS DE ESPECIALISTAS
Con este crecimiento de la mancha urbana se destaca la necesidad de trabajar en una política urbana que institucionalice la planeación metropolitana y se ciudadanicen los instrumentos de planeación, como lo establece la nueva Ley General de Asentamientos Humanos.
Asimismo, refieren que ante el crecimiento que sigue presentando el área metropolitana deberá impulsarse una nueva forma de movilidad como es la posibilidad de un tranvía o la construcción de túneles para conectar la ciudad además de fortalecer el tema de bicicletas hoy con la posibilidad del tema híbrido.