Como cada año, sólo que esta vez en ambiente de luto por el reciente fallecimiento de doña Victoria Aguilar Hernández, hermana del General de la Mesa Central Chichimeca de Santiago de Querétaro, se congregaron en el oratorio del cuartel general de esta danza de concheros, cientos de fieles devotos a la “Santísima Cruz de los Milagros” para formalizar la llamada (según palabra antigua) implantación de la santa velación en honor a sus ánimas protectoras.
Con la implantación de esta santa velación en el Barrio de San Francisquito, la tradicional Fiesta de los Concheros, llamados así por el uso de guitarras de concha de armadillo, huaje o madera, se da inicio formal a la 147 celebración fundada por don Atilano Aguilar, tataranieto de don Margarito Aguilar Hernández.
El oratorio de celebración, saturado de oloroso copal y vistosos arreglos florales abrazados por docenas de piezas de pan, frutas y veladoras, fue testigo de la exaltación de la Santísima Cruz de los Milagros, símbolo y estandarte de la danza y baile de Concheros.
A este significativo evento dedicado a las ánimas benditas que dan protección a sus herederos danzantes acudió, además de la familia Aguilar Hernández, cientos de fieles devotos y danzantes de al menos una veintena de grupos de diversos estados del país, incluyendo uno de Nueva York, E.U., así como el Guardián Principal del templo de la Cruz y el Presidente de las Fiestas Patronales, en representación del Obispo de la Diócesis de Querétaro, don Faustino Armendáriz.
Cabe señalar que con la implantación de la santa velación a las ánimas benditas, como máxima celebración de esta añeja usanza festiva, los diversos “círculos de danza” de Querétaro y de todo el bajo, retoman este histórico y tradicional festejo que resalta la gran memoria conchera.
Don Margarito Aguilar Hernández Nieto directo en quinta generación de don Atilano Aguilar, fundador de esta añeja tradición, como General de la Mesa Central Chichimeca, junto con su familia mantienen viva la práctica de los ritos antiguos de la fiesta conchera. Él es Dios.