Inician colecta de víveres y ropa en apoyo a caravana

PATRICIA LÓPEZ NÚÑEZ

  · lunes 22 de octubre de 2018

Migrar no es un delito, insiste el CAMI. /Fotos: Miriam Martínez

El Centro de Atención Marista al Migrante (CAMI) inició una colecta de víveres y ropa en apoyo para la caravana de Honduras, además que prevé necesitar voluntarios para la ayuda legal, médica y psicológica cuando llegue al estado, porque “migrar no es un delito”, afirmó Anahí Castillo Soltero, Coordinadora del CAMI.

Este centro se sumó al monitoreo con 23 casas de migrantes a lo largo del país que pertenecen a la Red de Documentación de las Organizaciones Defensoras de Migrantes (Redodem) y prevé que en 15 días llegará la caravana al centro del país, sí continúa su recorrido a pie de carretera.

Anahí Castillo recalcó que “como no se conoce la ruta que van a seguir lo que estamos haciendo es monitorear los lugares a donde se mueven, las necesidades, de qué forma se están atendiendo y ver de qué forma podemos ayudar y hacer presión para que los respeten”.

En el caso de Querétaro, el CAMI alista el apoyo con la Universidad Marista, con la diócesis de Querétaro, la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) y otras organizaciones sociales para iniciar la colecta de alimentos, agua y ropa, así como ofrecer albergue a los migrantes, porque “por la cantidad de personas, no nos daremos abasto y habrá que hacer acciones conjuntas”.

Aunque se prevé una llegada importante de migrantes, reconoció que “es posible que al centro del país ya no llegue la cantidad que está al sur en este momento”, porque pueden separarse y avanzar con mayor rapidez si su intención es llegar a Estados Unidos.

“Es muy probable que se necesiten voluntarios, faltarán muchas manos para distribución de ropa, comida, asistencia psicológica y jurídica y médica, hay que hacer ese vínculo con instituciones para una atención más integral, tenemos compañeros legales y hará falta que alguien ayude con los trámites si las personas quieren iniciar un trámite de regularización”, abundó.

La mayoría de los migrantes “quieren seguir su camino”, pero se estima que muchos de ellos podrían solicitar sus trámites de regularización en México, así que “es muy probable que estemos atendiendo muchos más trámites de regularización” que los que se atienden normalmente.

La activista pidió a los queretanos ser solidarios con esta población porque “migrar no es un delito” y porque ya pasaron situaciones muy difíciles en la frontera sur, de manera que “no son las condiciones bajo las que nadie quisiera esperar un trámite de regularización”.

“Hay que pensarnos como migrantes, reconocer nuestra propia historia familiar personal migrante y nuestras necesidades y de la familia, conseguir una mejor calidad de vida para nosotros, para las siguientes generaciones y migrar no es un delito, todos tenemos el derecho a buscar mejorar la calidad de vida y pueden acercarse a CAMI y les podemos dar mayor información. Hay que verlo desde una calidad más humana para entender las razones de las personas y por qué migran”, explicó.