El Poder Legislativo no debe ser un obstáculo para el nuevo presidente de la República, sin embargo tampoco puede ser un poder acrítico, señaló la presidenta de COPARMEX, Lorena Jiménez Salcedo en la reunión mensual con socios del organismo.

“El Congreso no debe ser un obstáculo para el nuevo presidente, pero tampoco un aplaudidor acrítico; el Congreso sí debe ser un contrapeso dispuesto al diálogo. No es una cuestión de voluntad, es la vocación para la que fue creado el Legislativo, para representar a los ciudadanos de los 300 distritos electorales del país”.

Lorena Jiménez agregó que la sociedad civil organizada también tendrá la responsabilidad de representar un contrapeso en las decisiones que adopte el nuevo gobierno con la intención de coadyuvar en temas de importancia nacional, tales como el combate a la corrupción y el desarrollo económico.

“El nuevo gobierno debe aprovechar el expertise y la investigación desarrollada desde el sector privado donde se han creado fuentes de políticas públicas prioritarias y apartidistas”.

Para concluir con su intervención la presidenta de la COPARMEX, reiteró que los contrapesos no deben representar disensos o confrontaciones sin sentido, por el contrario, el debate tiene que estar sustentado con propuestas y aportes que sumen a la democracia del país.

“El contrapeso se convierte en el instrumento para construir un solo México a partir de diferentes visiones que persiguen un objetivo común: transformar a México para el bienestar de todos. Un aporte sano que fortalece el debate institucional y que abona a la democracia”, indicó.

Durante la intervención de Arturo Hernández, activista y fundador de Los Supercívicos, quien fue el ponente invitado de este mes, resaltó la responsabilidad de la ciudadanía para provocar cambios que incidan en favor de la población puesto que la apatía, dijo, es el mayor mal de nuestra sociedad. En este sentido, invitó a los asistentes a pasar de los views y los likes a las acciones.