SUMARIO El trabajo de los jóvenes consiste en analizar,estudiar y formar la relación de los indígenas con la sociedad através de su identidad, su lengua y su cultura
Exigir el respeto de sus derechos es la premisa que motivó aestudiantes indígenas de la Máxima Casa de Estudios queretana aadaptar y traducir al otomí parte del sistema normativo mexicano,con la finalidad de que los hablantes de esta lengua sefamiliaricen con sus derechos; esto a través del manual “Nunanar he`mi ar`mui ya zapa hnini hñohño”, que significa “Unlibro de lo que es bueno para los pueblos indígenas”.
De ahí que los jóvenes trabajen directamente en lascomunidades de Santiago Mexquititlán y en San Ildefonso Tultepec,Amealco, y en Sabino de San Ambrosio, Tolimán –sitios de dondeson originarios–; además, parten del antecedente de que esteidioma tiene variantes cuya traducción debe respetarsegramaticalmente.
Dicho manual contiene la adaptación de algunos artículos de laConstitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y de la Leyde Derechos y Cultura de los Pueblos y Comunidades Indígenas delEstado de Querétaro.
“Dicen que los pueblos indígenas tienen derechos. El gobiernohace leyes para defenderlos, pero los indígenas no las conocen”,aportó Angélica de Jesús de Jesús, estudiante de laLicenciatura en Derecho, Campus Amealco, y que es originaria de SanIldefonso Tultepec.
El principal obstáculo al que se enfrentaron los universitariosante este proyecto fue explicar el contenido de las leyes yreglamentos en su lengua original de forma sencilla, pues lasmismas fueron redactadas en español con términos jurídicosajenos a su contexto socio-cultural.
“Queremos platicarles a los indígenas lo que la ley dice deellos, cómo los consideran y en qué les ayuda”, argumentóDiana Flores Almaraz, también estudiante de Derecho en el CampusAmealco y quien proviene de la comunidad de Santiago Mexquititlán.El trabajo de los jóvenes consiste en analizar, estudiar y formarla relación de los indígenas con la sociedad a través de suidentidad, su lengua, su cultura y sus costumbres.
“Es para que los indígenas puedan comprender la ley; está enlengua otomí para que sepan cuáles son sus derechos”, aseguróAngélica de Jesús de Jesús.
El coordinador del proyecto y estudiante de la Maestría enCiencias Jurídicas de la Facultad de Derecho, Lic. Sergio UrielUgalde Vega, detalló que dicho manual está basado en la Ley deDerechos y Cultura de los Pueblos y Comunidades Indígenas delEstado de Querétaro, que contiene 69 artículos y ha contado conmúltiples reformas.
“Es importante que haya procesos de traducción en virtud deque los campos semánticos en los términos jurídicos difierenmucho de la vida cotidiana de los pueblos y las comunidades”,puntualizó Ugalde Vega.
Para cumplir con esta tarea, los jóvenes han acudido a lasAsambleas Tradicionales de las comunidades y realizaron cápsulasorientadas a explicar el contenido de su proyecto; por ejemplo, eninternet se puede consultar el siguiente link:https://www.youtube.com/watch?v=yjo_aksLn_o.
Además, en dicho proyecto participan las estudiantes de laLicenciatura en Desarrollo Local de la Facultad de CienciasPolíticas y Sociales: Beatriz Hernández Hernández, de SantiagoMexquititlán y Olivia Luna Baltazar, de Sabino de San Ambrosio,Tolimán; además de Lorenzo de León González, estudiante delCampus Cadereyta.
Como último mensaje, las estudiantes concluyeron que, “en elDerecho muchas de las veces se habla en términos negativos, paracastigar. Mientras que en el otomí, todo se dice en positivo...siempre en positivo”.