La diócesis de Querétaro lamentó que se presenten feminicidios, pues es un reflejo negativo de la sociedad, por lo que llamó a todos los sectores a valorar el papel de las mujeres como pilar de la familia, indicó el vicario general de la Diócesis, Martín Lara Becerril.
“Es muy lamentable que a una persona, en este caso a las mujeres, por el simple hecho y la grandeza de ser mujer sean eliminadas, es muy lamentable que se den los feminicidios, el que se atente contra cualquier persona, pero nosotros el cariño y el aprecio que le tenemos particularmente a la mujer es algo muy grande, matar o atentar contra una mujer por el hecho mismo de ser mujer es algo realmente muy lamentable”.
Dijo que el papel de la sociedad es valorar y tomar en cuenta la formación desde la familia, pues es donde se aprecia el papel de la madre y la mujer como eje y base de la familia.
“Desde luego es una noticia muy triste que a una mujer se le mate por el hecho de ser mujer, yo quisiera invitar a la sociedad a que volvamos nuestros ojos a las mujeres para ver la grandeza que la mujer tiene, que la valoremos en todo el sentido grandioso y positivo que una mujer aporta a la familia y a la sociedad, porque es una columna social y debilitar una columna pone en peligro el edificio y atentar en contra de las mujeres por el hecho de ser mujer debilita nuestra sociedad”.
Lara Becerril lamentó que se registren estos casos en la sociedad, pues es una alarma para que la sociedad y autoridades trabajen en reconstruir los lazos y la convivencia con las familias, pues el deterioro ha sido paulatino.
“Es un reflejo de como las familia se han ido deteriorando paulatinamente porque no es posible que el seno de la mujer que da a luz, ese seno de la mujer sea el que se silencia mediante la muerte, si la mujer es la fuente de la vida ¿cómo es que se busca matarla?, por eso es algo realmente muy lamentable”.
Y añadió; “quiero invitar a la sociedad para que pongamos nuestros ojos en nuestra madre que es mujer, en nuestras hermanas, en las mujeres y el aporte valiente que dan a la sociedad, valorarla en su dignidad de mujer, valorarla en su misión delante de la iglesia y en su misión a nivel social, es algo muy lamentable pero es algo que debemos de enfrentar valorando de manera fuerte, contundente y radical el papel de la mujer”.