Ivo y Edo son dos canes de raza pastor alemán que trabajan como detectores de narcóticos en el Aeropuerto Internacional de Querétaro.
Su tarea es simple: olfatear maletas, bolsas, mochilas y hasta a las personas que abordan aviones en la terminal para detectar la existencia de un posible narcótico.
El agente de la Guardia Nacional, Israel Lorenzo Isla, explicó que el trabajo con los binomios consta de una responsabilidad dividida, ya que un 50% lo conforma el adiestramiento y la capacitación que debe de tener el manejador, así como el otro 50% que implica el entrenamiento y el cuidado del perro.
Israel Lorenzo puntualizó que la mentalidad de trabajo por parte del can, es haciéndolo creer que está jugando buscando un juguete, por lo que tiene la capacidad de poder olfatear y concentrarse para detectar los modos y las formas en que están trasladando la droga dentro de maletas o mochilas.
“Los perritos tienen un olfato muy bien desarrollado que les permite identificar a grandes escalas la posible existencia de narcóticos o drogas aunque no lo estén viendo físicamente, nosotros lo que hacemos es crear un ambiente para que ellos crean que están jugando y están buscando un juguete, siempre al terminar una búsqueda se les premia, para hacerles saber que hicieron un buen trabajo y no pierdan la esencia de la sustancia que buscan”, precisó el agente de la Guardia Nacional.
El agente de la Guardia Nacional, Adrián Ochoa comentó que existen diferentes tipos de entrenamientos para los ejemplares de búsqueda, estos pueden rastrear desde explosivos, narcóticos o restos humanos.
“Cada entrenamiento y comportamiento del perro debe de ser distinto, no se puede usar a un ejemplar para todas las búsquedas, se especializa y trabaja para un sólo tipo de búsqueda por las características que deben de tener cada perro y cada tipo de entrenamiento”, comentó Adrián Ochoa.
Derivado de esto, explicó que no todos los perros tienen las características necesarias para ser buscadores, ya que tanto en sus genes como en su entrenamiento y comportamiento deben de cumplir estándares para que puedan ser elegidos para ser adiestrados por el manejador.
“En este caso de aeropuertos se necesitan perros que puedan soportar el ruido, que no les incomode, que tengan ciertas características físicas para moverse y resistir las jornadas”, precisó Adrián Ochoa.
El manejador prácticamente es quien cuida, entrena y vive con el perro, él debe de entablar una relación cercana para conocer al ejemplar y saber cuando necesita hacer sus necesidades o cuando tienen su tiempo de jugar, de comida y de dormir.
“El manejador tiene la tarea de aprender y convivir del perro, conocer sus gestos y controlarlos, es un trabajo en equipo totalmente, muchas veces dicen que cuando hay un error es por culpa del perro pero no es así, el manejador es quien se debe de responsabilizar de él”, aseguró Israel Lorenzo Isla.
Aproximadamente, un perro buscador tiende a servir durante 10 años de búsqueda, como todo soldado o miembro de la Guardia Nacional, al retirarse se le hace una celebración y mención honorífica; una vez retirado, el perro es dado en adopción con el propósito que pueda tener una vida de retiro ejemplar y viva sus últimos años en compañía de un cuidador responsable.
“Nosotros cuando se retira un perro se le hace una mención honorífica y se pone en adopción, nos aseguramos que quien lo adopte le proporcione condiciones para tener una buena vida y sobre todo que cuidará de él”, explicó Israel Lorenzo Isla.
En el estado de Querétaro, gracias a la existencia de los perros buscadores se han realizado 60 decomisos de sustancias como marihuana, LSD, cocaína, fentanilo, metanfetamina, éxtasis y diversas drogas de diseño, tales que el humano a simple vista no puede apreciar, incluso los rayos x no tiene la capacidad de identificar.
Actualmente existen a nivel nacional 131 binomios caninos desplegados en 29 puntos distintos de la república mexicana, existen 35 elementos que son reconocidos a nivel internacional contando con un aproximado de cinco mil aseguramientos en el mundo.