Este año la Basílica de Nuestra Señora de los Dolores de Soriano podría recibir hasta un millón de peregrinos durante las fiestas de la patrona de la iglesia queretana, aseveró el obispo de la Diócesis de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, quien recordó que la celebración se realiza justo siete días antes de Semana Santa.
En entrevista indicó que Querétaro al ser un pueblo peregrino y devoto de la Virgen María, hace que miles de fieles acudan a la basílica en el municipio de Colón, para rendir honores a la patrona de la Iglesia, es por ello que como cada año se espera alta afluencia de visitantes en la zona.
“Son previos a la Semana Santa donde celebramos la feria grande, esto provoca la peregrinación de miles y miles es una de las más grandes en el año que llega a contabilizar un millón de peregrinos, de tal manera que hay muchos peregrinos que quieren visitar a nuestra patrona diocesana, esto nos llena de alegría porque queremos que crezca más y más la veneración y la fe en la intercesión de la Santísima Virgen María patrona de la Diócesis”, manifestó Armendáriz Jiménez.
Dijo que durante la festividad se puede observar en la zona diferentes columnas de fieles, quienes se organizan para llegar por su propia cuenta a la basílica y venerar a la Virgen de los Dolores de Soriano.
El Obispo de la Diócesis de Querétaro, apuntó que estos días de Cuaresma son de preparación para una de las mayores romerías queretanas: la peregrinación a la Basílica de Guadalupe, en la que participan más de 200 grupos de todos los decanatos de la entidad, quienes actualmente se forman espiritualmente para el momento.
“Ahorita la preparación es espiritual estamos rezando para que lleguemos a la peregrinación preparados espiritual y físicamente de tal manera que hagamos un recorrido agradable a Dios preparándonos y aprovechando el tiempo cuaresmal de conversión y es una oportunidad para dejar entrar a Dios en el corazón”, afirmó.
En este sentido mencionó que lo que identifica la Iglesia a sus fieles en esta temporada de Cuaresma, es el ayuno de obras malas, es decir, dejar todo lo que lo le agrada a Dios, “Para que el Señor se quede con nosotros”.
Apuntó que como parte de los preparativos de la peregrinación al Tepeyac, ya se realizó el sorteo de la columna femenil, para definir el orden de salida de los grupos, acción que también realizarán los varones el próximo mes para garantizar una buena organización de la romería.
