“Como coordinador de Protección Civil estatal cumplí responsablemente”, afirmó Carlos Rodríguez DiBella, titular de la coordinación estatal, quien reconoció que mientras se registraba la campal en el estadio se encontraba en un torneo de pesca en el municipio de Cadereyta de Montes, atendiendo un asunto personal.
Lo anterior, durante su comparecencia ante la comisión de seguridad pública y protección civil de la LX Legislatura sobre los hechos ocurridos el pasado 5 de marzo en el estadio Corregidora, que dejaron un saldo oficial de 26 lesionados en Querétaro y al menos 22 en Jalisco.
“Desde un punto de vista personal, como coordinador estatal de protección civil, al haber yo asignado a personal debidamente capacitado y con el grado de experiencia que ha quedado mencionado en mi manifestación, considero que cumplí responsablemente con las acciones correspondientes”, subrayó.
Cuestionado sobre dónde se encontraba durante la campal, el funcionario estatal reconoció que se encontraba en un torneo de pesca en el municipio de Cadereyta Montes; aunque aseveró que mantuvo comunicación y coordinación constante con el jefe de área de atención de riesgos y eventos. Agregó que, cuando se le notificó del incidente, se trasladó al lugar de los hechos para atender la emergencia.
“Efectivamente, diputado, como bien apunta de manera acertada, yo me encontraba en el municipio de Cadereyta de Montes, justamente atendiendo a una cuestión de carácter personal, que como bien lo menciona es un torneo de pesca; sin embargo, quiero recalcar que de manera precisa y constante tuve comunicación y coordinación con mi equipo de trabajo”, indicó a Paul Ospital.
A la pregunta del diputado Juan José Jiménez sobre si renunciará al cargo, enfatizó que “en tiempos de crisis no es momento de renunciar” y afirmó que si el gobernador Mauricio Kuri considera pertinente removerlo tiene facultades para hacerlo.
Sobre su actuar durante el encuentro deportivo, el coordinador reconoció que como autoridad confiaron en la palabra de la directiva de Gallos y de la empresa de seguridad privada sobre que había los elementos de seguridad suficientes para organizar el evento, situación que no fue verificada por la Coordinación de Protección Civil estatal.