/ miércoles 28 de febrero de 2018

Manuel Barreiro, de mesero a millonario

De mesero a millonario, así se resume el meteórico progreso económico en 25 años en Querétaro de Manuel Barreiro Castañeda, quien es acusado de participar en una triangulación de recursos a favor del candidato presidencial Ricardo Anaya Cortés.

El hoy exitoso empresario no siempre gozó de fortuna y se le recuerda atendiendo las mesas de un tradicional restaurante en el centro de la capital queretana, El Fogón del Camarada, cuya sencilla especialidad son: las milanesas y la sopa de fideo.

Aquel empleo cuando estudiaba preparatoria en el Instituto San Javier contrasta con su fastuoso estilo de vida reciente: es dueño de una de las casas más opulentas del Club Campestre de Querétaro y de una residencia en Miami, además de inversiones y sociedades financieras en Canadá, así como de varias empresas inmobiliarias.

Además, según testimonios, en las fiestas de alta sociedad a las que asistía junto con su esposa Ana Paula Ugalde Herrera “usaba relojes carísimos” y llegaba con mucha servidumbre, “hasta tres niñeras traía”, según fuentes consultadas por DIARIO DE QUERÉTARO. Eso sin contar los constantes viajes entre sus casas de Miami y Querétaro y su oficina en Canadá, así como largas estancias en Madrid.

De aquella época de preparatoria en el más tradicional colegio queretano, entre los años 1989 y 1992 cuando era mesero, también data el contacto de Barreiro Castañeda con los más prominentes y acaudalados apellidos de Querétaro que, en exitosas sociedades, le permitió amasar una cuantiosa fortuna en tan sólo 15 años.

Si algo distingue a Barreiro eso es, sin duda, el excelente olfato empresarial, su meteórico ascenso económico y la vinculación económico-empresarial con los apellidos de mayor arraigo local.

Consultado por DIARIO DE QUERÉTARO, Andrés Puente, propietario del restaurante El Fogón del Camarada, confirmó que Manuel Barreiro Castañeda trabajó en su establecimiento cuando éste estudiaba preparatoria, pero se negó a hacer declaraciones por considerar al exempleado como “más que un amigo” que más bien es “parte de mi familia”.

EL “GOLPE DE SUERTE”

Su buena fortuna comenzó en los años dos mil, cuando se ganó la confianza de una “vaca sagrada” de los negocios inmobiliarios y financieros en Querétaro: Joey Oleskowsky, quien lo puso al frente del Parque Industrial Querétaro financiado por el fondo de inversiones Hines pero quien también lo despidió en 2007, presuntamente por haberlo sorprendido en malos manejos de su empresa.

Ese mismo año, 2007, Barreiro Castañeda funda Aston Capital Partners, empresa para la que copia el modelo del fondo de inversiones Hines y en la cual inyecta capitales provenientes de Canadá, pero también de sus rutilantes amistades queretanas.

Bajo esa marca es que construye diversas plazas comerciales y parques industriales de mediana longitud en Querétaro.

Siendo dueño de Aston Capital Partners es que Manuel Barreiro Castañeda logra dar un golpe decisivo y definitivo para el éxito de su carrera empresarial: consigue un muy buen acuerdo con el Gobierno estatal del entonces gobernador Francisco Garrido Patrón y su secretario particular, Ricardo Anaya Cortés, para adquirir en abonos los terrenos de lo que hoy es el Parque Industrial Tecnológico Innovación Querétaro.

Ese negocio inmobiliario, favorecido por el gobierno panista de Garrido Patrón, es el que hasta la fecha es considerado como lo que “catapultó” la fortuna de Barreiro y sus posteriores empresas, incluida la reciente adquisición de 30 hectáreas estratégicas de uso habitacional llamadas Hacienda La Carlota, en el municipio de Corregidora, y la fundación de la empresa especializada en parques industriales Advance Real State que mantiene tres proyectos en desarrollo.

TODOS DEL SAN JAVIER

Barreiro o “El Flaco”, como le dicen sus cercanos, es producto del Instituto San Javier, donde estudió secundaria y preparatoria entre los años 1987 y 1992 y por donde pasaron todos los personajes implicados, incluso los acusadores, en la denuncia de presunta triangulación de recursos en torno a Ricardo Anaya Cortés.

Siempre fue un estudiante brillante. Después de concluir la preparatoria Barreiro estudió Negocios Internacionales en el Tecnológico de Monterrey, graduándose en 1998, luego cursó una maestría en Texas y otro posgrado en Japón.

En octubre de 2005 se casó con Ana Paula Ugalde Herrera, hermana de Álvaro Ugalde Herrera, uno de los mejores amigos del hoy candidato presidencial Ricardo Anaya Cortés, quien a su vez acudió a la boda siendo en ese entonces uno de los personajes más poderosos del estado de Querétaro, secretario particular del gobernador Francisco Garrido Patrón, y quien a la postre compró en 2014 un terreno en su parque industrial por 10 millones de pesos a través de la empresa JuniSerra para venderlo, dos años después ya equipado como nave industrial, en 54 millones de pesos a la empresa Manhattan Master Plan propiedad de otro exalumno del Colegio San Javier: el arquitecto Juan Carlos Reyes García.

Tras las revelaciones de una supuesta triangulación de recursos por parte de dos denunciantes, entre ellos el abogado Daniel Rodríguez Velazco, también exalumno del San Javier y socio comercial de Barreiro Castañeda desde 2012, Ricardo Anaya Cortés admitió en entrevista televisiva conocer, más no ser “amigo” de Manuel Barreiro Castañeda, además de negar haber hecho tratos de compraventa con este empresario queretano cuyo éxito le permitió dar un sorprendente salto de mesero a millonario en dos décadas.

De mesero a millonario, así se resume el meteórico progreso económico en 25 años en Querétaro de Manuel Barreiro Castañeda, quien es acusado de participar en una triangulación de recursos a favor del candidato presidencial Ricardo Anaya Cortés.

El hoy exitoso empresario no siempre gozó de fortuna y se le recuerda atendiendo las mesas de un tradicional restaurante en el centro de la capital queretana, El Fogón del Camarada, cuya sencilla especialidad son: las milanesas y la sopa de fideo.

Aquel empleo cuando estudiaba preparatoria en el Instituto San Javier contrasta con su fastuoso estilo de vida reciente: es dueño de una de las casas más opulentas del Club Campestre de Querétaro y de una residencia en Miami, además de inversiones y sociedades financieras en Canadá, así como de varias empresas inmobiliarias.

Además, según testimonios, en las fiestas de alta sociedad a las que asistía junto con su esposa Ana Paula Ugalde Herrera “usaba relojes carísimos” y llegaba con mucha servidumbre, “hasta tres niñeras traía”, según fuentes consultadas por DIARIO DE QUERÉTARO. Eso sin contar los constantes viajes entre sus casas de Miami y Querétaro y su oficina en Canadá, así como largas estancias en Madrid.

De aquella época de preparatoria en el más tradicional colegio queretano, entre los años 1989 y 1992 cuando era mesero, también data el contacto de Barreiro Castañeda con los más prominentes y acaudalados apellidos de Querétaro que, en exitosas sociedades, le permitió amasar una cuantiosa fortuna en tan sólo 15 años.

Si algo distingue a Barreiro eso es, sin duda, el excelente olfato empresarial, su meteórico ascenso económico y la vinculación económico-empresarial con los apellidos de mayor arraigo local.

Consultado por DIARIO DE QUERÉTARO, Andrés Puente, propietario del restaurante El Fogón del Camarada, confirmó que Manuel Barreiro Castañeda trabajó en su establecimiento cuando éste estudiaba preparatoria, pero se negó a hacer declaraciones por considerar al exempleado como “más que un amigo” que más bien es “parte de mi familia”.

EL “GOLPE DE SUERTE”

Su buena fortuna comenzó en los años dos mil, cuando se ganó la confianza de una “vaca sagrada” de los negocios inmobiliarios y financieros en Querétaro: Joey Oleskowsky, quien lo puso al frente del Parque Industrial Querétaro financiado por el fondo de inversiones Hines pero quien también lo despidió en 2007, presuntamente por haberlo sorprendido en malos manejos de su empresa.

Ese mismo año, 2007, Barreiro Castañeda funda Aston Capital Partners, empresa para la que copia el modelo del fondo de inversiones Hines y en la cual inyecta capitales provenientes de Canadá, pero también de sus rutilantes amistades queretanas.

Bajo esa marca es que construye diversas plazas comerciales y parques industriales de mediana longitud en Querétaro.

Siendo dueño de Aston Capital Partners es que Manuel Barreiro Castañeda logra dar un golpe decisivo y definitivo para el éxito de su carrera empresarial: consigue un muy buen acuerdo con el Gobierno estatal del entonces gobernador Francisco Garrido Patrón y su secretario particular, Ricardo Anaya Cortés, para adquirir en abonos los terrenos de lo que hoy es el Parque Industrial Tecnológico Innovación Querétaro.

Ese negocio inmobiliario, favorecido por el gobierno panista de Garrido Patrón, es el que hasta la fecha es considerado como lo que “catapultó” la fortuna de Barreiro y sus posteriores empresas, incluida la reciente adquisición de 30 hectáreas estratégicas de uso habitacional llamadas Hacienda La Carlota, en el municipio de Corregidora, y la fundación de la empresa especializada en parques industriales Advance Real State que mantiene tres proyectos en desarrollo.

TODOS DEL SAN JAVIER

Barreiro o “El Flaco”, como le dicen sus cercanos, es producto del Instituto San Javier, donde estudió secundaria y preparatoria entre los años 1987 y 1992 y por donde pasaron todos los personajes implicados, incluso los acusadores, en la denuncia de presunta triangulación de recursos en torno a Ricardo Anaya Cortés.

Siempre fue un estudiante brillante. Después de concluir la preparatoria Barreiro estudió Negocios Internacionales en el Tecnológico de Monterrey, graduándose en 1998, luego cursó una maestría en Texas y otro posgrado en Japón.

En octubre de 2005 se casó con Ana Paula Ugalde Herrera, hermana de Álvaro Ugalde Herrera, uno de los mejores amigos del hoy candidato presidencial Ricardo Anaya Cortés, quien a su vez acudió a la boda siendo en ese entonces uno de los personajes más poderosos del estado de Querétaro, secretario particular del gobernador Francisco Garrido Patrón, y quien a la postre compró en 2014 un terreno en su parque industrial por 10 millones de pesos a través de la empresa JuniSerra para venderlo, dos años después ya equipado como nave industrial, en 54 millones de pesos a la empresa Manhattan Master Plan propiedad de otro exalumno del Colegio San Javier: el arquitecto Juan Carlos Reyes García.

Tras las revelaciones de una supuesta triangulación de recursos por parte de dos denunciantes, entre ellos el abogado Daniel Rodríguez Velazco, también exalumno del San Javier y socio comercial de Barreiro Castañeda desde 2012, Ricardo Anaya Cortés admitió en entrevista televisiva conocer, más no ser “amigo” de Manuel Barreiro Castañeda, además de negar haber hecho tratos de compraventa con este empresario queretano cuyo éxito le permitió dar un sorprendente salto de mesero a millonario en dos décadas.

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