El presidente municipal de Querétaro, Marcos Aguilar Vega encabezó la inauguración de la planta de tratamiento y separación de residuos sólidos urbanos, considerada la más grande y moderna de América Latina.
La nueva planta de tratamiento, ubicada en avenida Paseo Querétaro, antes Carretera Mompaní, tuvo inversión privada de 300 millones de pesos y permitirá aprovechar el 78% de los residuos sólidos urbanos.
El alcalde destacó que esta planta es una de las obras más importantes que se han realizado en nuestra ciudad en los últimos tiempos, pues marca un antes y un después en el futuro de la ciudad.
Explicó que antes toda la basura se depositaba en el relleno sanitario, lo que significaba un deterioro para nuestro medio ambiente y un enorme costo financiero a cargo de los contribuyentes.
“Ahora el 78% de los residuos sólidos serán reutilizados, esto significa dejar de enterrar la basura, prolongar la vida del relleno sanitario, generar un ahorro al erario municipal de 42 millones de pesos anuales”, dijo.
Destacó además que esta nueva planta permitirá cumplir con la Ley de Prevención y Gestión Integral de Residuos, del Estado de Querétaro, y con la Ley General de Cambio Climático.
La planta, en cuyo montaje y puesta en marcha la empresa Broquers Ambiental, SA de CV., invirtió 300 millones de pesos, tiene capacidad para procesar mil 200 toneladas de Residuos Sólidos Urbanos (RSU) por día.
Es considerada la planta separadora más grande y con mejor tecnología de América Latina, porque tiene equipamiento automatizado para separar el material orgánico, el ferroso y el reciclable, garantizándose así un aprovechamiento del 78%.
En su oportunidad, el presidente del Consejo Broquers Ambiental, Diego García Coudurier, señaló que esta planta evitará la emisión a la atmósfera de más de 100 mil toneladas de bióxido de carbono.
Lo anterior explicó, es equivalente ambientalmente hablando a que 19 mil 426 coches particulares dejen de circular diario durante un año, o que 38 millones 600 mil litros de gasolina se quemen.
Agregó que con el papel, cartón y la celulosa del tetra pack que se reciclará, evitarán la tala de 38 mil 188 árboles tipo conífera; y el metal que se reciclará requerirá el 74% menos energía para rehacer nuevos productos.
La capital genera mil 59 toneladas de basura al día, cantidad que podrá ser procesada en un lapso de 24 horas, generando además 300 toneladas de composta, que el concesionario entregará gratuitamente para las áreas verdes.
Sólo 22% de los residuos sólidos llegará al relleno sanitario de disposición final, logrando un mejoramiento ambiental significativo para los pobladores del municipio de Querétaro e incrementar la vida útil de dicho relleno.
La planta tiene dos estaciones de recepción para residuos, ubicadas en cada extremo de la parte trasera de la nave, con lo que se elevará la productividad y ésta repercutirá en la recolección de las colonias del municipio.
A la planta también llegarán los residuos recolectados en las 12 mil papeleras que hay en el municipio y de los depósitos soterrados, instalados en diversos puntos de la ciudad.
Su puesta en funcionamiento redituará en ahorro anual de recursos públicos municipales por 8.5 millones de pesos, pues disminuirá notoriamente la cantidad de basura que se deposite en el relleno.
Para su edificación se requirieron 300 toneladas de acero, mil 400 rodillos, seis kilómetros de cables y un kilómetro de bandas. Será la de mayor grado de automatización en toda América Latina.
La planta de separación de Querétaro fue diseñada y fabricada por Bianna Recycling, líder mundial en este tipo de instalaciones. La concesión para su operación fue concursada y ganada por Broquers Ambiental S.A. de CV.
En esta planta tendrán empleo formal a 206 personas que trabajarán dos turnos diarios en la separación y el tercer turno se dedicará para mantenimiento preventivo y limpieza de los equipos.