Con una economía enferma, debilitada y en riesgo de mortandad para decenas de empresas, la pandemia no da tregua en este inicio del 2021, un año donde las condiciones para retomar el dinamismo de las actividades no será en corto plazo.
Una crisis económica y sanitaria que ha dejado a su paso serios estragos en las unidades económicas y que ha derivado también en una precarización de los empleos formales con jornadas laborales ajustadas y salarios recortados.
Sectores como los servicios, comercio y entre ellos el tema educativo que también forma parte las afiliaciones de Coparmex, al momento con 19 instituciones privadas en su mayoría enfocadas a la oferta del nivel superior, han sido los segmentos más golpeados en estos 10 meses de emergencia sanitaria, además del tema de manufactura que ha visto disminuir sus niveles de operatividad en las líneas de producción, situación que termina por mermar el mercado laboral.
LA CRISIS.
En entrevista y a solo un mes de asumir la presidencia de la Coparmex, Jorge Camacho Ortega, expone los grandes retos que presenta este nuevo año y la preocupación de los empresarios por el riesgo latente de caer en un escenario de nuevo confinamiento total que llevaría a la extinción a por lo menos un 10% de las 600 empresas socias del organismo en el estado de Querétaro que se sumaría a 50 establecimientos que meses atrás sucumbieron ante el covid-19.
Preciso que se trata principalmente de empresas pequeñas y medianas del sector de los servicios que ofertan entre 600 y 700 empleos que en estos momentos se encuentran en terapia intensiva.
En este escenario adverso, dijo que los empresarios siguen trabajando para tratar de mantenerse en el mercado y salvar hasta donde sea posible las plazas laborales, pero también hacen un llamado urgente a la responsabilidad ciudadana a cumplir y acatar con las medidas preventivas de sanidad que permitan tener un escenario de mejor estabilidad.
Aseguró que “los empresarios van a seguir adelante porque eso está en el ADN, el correr riesgos y un negocio es un riesgo, vamos para adelante no nos echamos para atrás; seguiremos trabajando, generando economía y empleos”.
Sin embargo, reconoce que les preocupa el escenario actual y que en el caso de la pandemia empeoren las cosas y en consecuencia la economía se vea aún más afectada al grado de llevarnos, dijo, a un encierro y parálisis total de la economía.
Un Escenario que enfatizó “sepultaría” definitivamente a centros de trabajo, y es que pese a los buenos deseos de que el 2021 sea mejor que el año anterior la falta de certidumbre se mantiene, lamentó.
“El cambio de año es nada más un cambio de fechas, pero los días son iguales, la pandemia sigue igual; estamos en el escenario C y yo espero que podamos irnos y bajemos al B, para poder reactivar la economía, pero eso depende de la población”, puntualizó.
Dijo lograr bajar al escenario B, las empresas que hoy sobreviven estarán en condiciones de seguir subsistiendo, aunque hay algunas que están “ya en la tablita”, lamentó,
NÚMEROS
Jorge Camacho, Informó que en diez meses de epidemia, las 600 empresas socias del Centro Empresarial se han visto afectadas de estas un 40% con niveles de gravedad importantes, un 5% obligadas al cierre definitivo y “si regresamos a un semáforo rojo se tendrá el cierre adicional de un 5 a 10% de empresas socias de Coparmex”, alertó.
Cabe citar que hasta antes de la pandemia el organismo sumaba 900 empresas socias lo mismo del sector servicios, comercios que de manufactura con una generación conjunta de 50 mil empleos formales.
Para Jorge Camacho, con un 2020 perdido económicamente, pues a nivel nacional se espera un decrecimiento del 10%, el camino de la reactivación no será a corto plazo y si bien reconoció que Querétaro ha sido de las entidades con mayor ritmo de recuperación que se refleja con el 65% de empleos retomados, de más de 34 mil cancelados, llevará por lo menos todo el primer semestre para sumar las 17 mil contrataciones pendientes.
SIN APOYOS
Finalmente cuestionó la falta de estrategias y apoyos del gobierno federal ya que de haber existido, el impacto y sobre todo el quebranto de empresas y la pérdida de empleos resultarían menor.
Dijo que no sólo no se implementaron medidas anti cíclicas, ni se tomaron en cuenta propuestas del sector privado, en específico de este Centro Empresarial, sino que ahora con la decisión federal de aumentar en 15% el salario mínimo “muchas empresas no lo van aguantar”.