La Diócesis de Querétaro dedicó la misa dominical en honor a los tripulantes fallecidos del helicóptero de la Secretaría de Marina que iniciaría a ayudar el combate a los incendios en la Sierra Gorda.
El obispo de la Diócesis de Querétaro, Faustino Armendáriz reconoció la labor y esfuerzo de cientos de soldados que trabajan en el plan DN-III, brigadistas de la Comisión Nacional Forestal y personal de Protección Civil.
“Ofrecimos este domingo la Santa Misa por el eterno descanso de los soldados y el brigadista, que por cierto era de Colón, hay que reconocer el valor de la ayuda que estaban prestando a extinguir los incendios que tanto han asolado a la Sierra Gorda”.
Pidió a las autoridades que se realice una investigación exhaustiva para dar con las causas del accidente y también con el origen de este incendio que ha afectado de manera severa el ecosistema de la Sierra Gorda.
“También pedimos por los esfuerzos que hacen estos hermanos para realizar su responsabilidad, estoy de acuerdo en que murieron en cumplimiento de su deber y debemos que rezar por ellos y reconocerles esa tarea que han realizado”.
Autoridades federales dieron a conocer los nombres de los tripulantes y personal que se encontraba en la aeronave siniestrada; Miguel Ángel Ramos Machorro, José de Jesús Medina Santiago, Carlos del Toro Rosas, Misael Maldonado, Andrés Baldovinos López y Luis Fernando Pérez Balderas, brigadista de la CONAFOR.