A temprana hora llegaron al Hospital General de Querétaro familiares y amigos de las personas lesionadas durante la campal registrada en el estadio Corregidora; además, al lugar llegaron habitantes del estado a ofrecer ayuda comunitaria a quienes esperaban información sobre sus pacientes.
Gustavo Gómez, padre de uno de los lesionados, fue uno de los que llegó a la una de la mañana en busca de su hijo. En entrevista, contó que el ingreso al hospital para saber de su hijo fue complicado, por lo que decidió "armar un relajo" y fue cerca de las 4:00 horas cuando ingresó al nosocomio.
"Yo llegué aquí porque me hablaron de que estaba mi hijo, entré, pero para entrar fue un relajo, tuve que amenazar de que iba a hablar con los medios para que me dieron acceso; yo llegué aquí a la 1 de la mañana y ya pude ingresar hasta las 4:00", contó.
Para Gustavo la falta de seguridad fue evidente, pues en videos que circulan en redes sociales se ve a la gente corriendo por todo el estadio y a un cuerpo de seguridad ausente. Por ello, exigió a las autoridades y al Club Querétaro justicia y garantía para las personas que acuden a los encuentros deportivos.
"Uno cuando ve los videos no ve nada de seguridad, la gente corre, hace lo que quiere en el estadio, golpean y no se ve presencia de la seguridad. Da mucha impotencia ver que los están golpeando", señala.
Alejandro Hernández, familiar de otra de las víctimas de 21 años, relató que hasta cerca de las 9:30 horas supieron del paradero de su sobrino, quien había salido por primera vez de Jalisco. Alejandro y su hermana, madre de la víctima, viajaron a Querétaro desde Guadalajara para valorar el traslado de su paciente a su estado de origen.
“Nos dimos a la tarea, prácticamente toda la noche, a estar buscando en redes sociales, Facebook, aquí en el hospital y hasta que dimos con él. Vía telefónica no contestaba, se iba directo a buzón. Lo primero que nos comentaron es que había fallecido y nos pusimos a investigar y lo encontramos”, señaló.
Queretanos solidarios llevan comida, pan, agua y refresco a familiares
Tras la llegada de varios familiares de lesionados al Hospital General de Querétaro, se ofreció alimento afuera del nosocomio, mientras se encontraban a la espera de informes médicos.
Desde pan, fruta, agua y refresco, varias familias de Querétaro comenzaron a llegar desde las 11:00 horas para ofrecer alimento a las personas.
Jaime Hernández fue uno de los que llegó con su esposa Mirna, sus tres hijos y su mamá a ofrecer café y pan como una señal de arrepentimiento ante lo ocurrido el sábado pasado.
“Dar el mensaje a la gente que debemos unirnos como mexicanos, nos falta piedad. Ayer vimos imágenes terribles y crueles, entonces hay que arrepentirnos de todo eso. A nombre de los queretanos de bien les pedimos una disculpa abiertamente”, mencionó.
Guardia Nacional y Poes presentes en el lugar
Ante la concentración de familias afuera del Hospital General, las cuales fueron resguardadas al interior del mismo, elementos de la Guardia Nacional se hicieron presentes alrededor de las 11:00 horas.
Al interior, además se encontraba personal de la Policía estatal, así como de la Fiscalía General del estado; sin embargo, afuera del edificio no hubo presencial policial.