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Las rejas que rodean los límites del paseo de los venados en el Parque Nacional El Cimatario continúan dañadas en tramos que circundan el paso de la fauna silvestre, pues incluso son visibles cortes y falta del material que la soporta.
Activistas han denunciado desde 2020 que el robo de los materiales de la malla ciclónica que circula el área natural protegida tiene como consecuencia el peligro de las especies que ahí se conservan, como es el caso de los venados cola blanca.
El estimado de malla ciclónica que han robado en partes o en su totalidad es de casi dos kilómetros, según las denuncias que diversas ambientalistas han publicado a través de sus redes sociales.
La carretera por la que se puede observar los robos que ha sufrido la infraestructura del parque es estrecha y los vehículos que por ahí circulan tienen pocas posibilidades de esquivar a la fauna que salga del área natural protegida debido a la falta de malla en tramos tan amplios.
A pesar de que los materiales de los que está hecha la protección que han sustraído no son costosos, es posible que quienes han hurtado los tramos los comercialicen en establecimientos de chatarra o reciclaje por mayoreo.
Las autoridades del municipio de Corregidora, donde se ubican los tramos que han sido sustraídos, se han deslindado del mantenimiento, y la investigación de los hechos, pues el Parque está a cargo de las dependencias federales como la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) o la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA).
El pasado 6 de enero el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, aseguró en su conferencia matutina que se investigarán las intenciones de desarrollos inmobiliarios de interferir en las zonas aledañas para construir, además de que se privilegiará la protección al medio ambiente en el Parque Nacional El Cimatario.
