Este año se perderá la mitad de las cosechas por la temporada de sequía que se ha presentado desde hace dos años, de acuerdo con Ángel Hernández, representante de la organización de Invernaderos Amealcenses de Hortalizas S.A. de C.V., que alberga a siete cooperativas de productores de diversas comunidades del municipio de Amealco.
Debido a la carencia de lluvias que ha persistido, Hernández, que siembra flores ornamentales y tomates, lamentó: “este año voy a poder sembrar el 50%, lo demás se va a quedar abandonado porque no tengo agua”.
A diferencia de otros productores que cuentan con sistemas que les suministran agua desde pozos en el subsuelo, los integrantes de la organización que encabeza Hernández, dependen por completo de la cantidad de precipitación que proviene del cielo “hacemos captación de lluvia en algunos bordos, pero este año están completamente vacíos, eso es muy triste y complicado para nosotros porque no sabemos qué hacer. Clamamos al cielo, pero pareciera que todavía no nos toca”, relató.
El destino principal de los productos que cosecha es el mercado local, situado principalmente en San Juan del Río y la capital queretana.
Además de la falta de lluvia, agregó que una complicación que se ha sumado son los fuertes vientos que hubo durante los últimos días de 2020 y han continuado en lo que va de 2021; como consecuencia, los invernaderos fueron afectados, acabando incluso con algunas infraestructuras importantes.
Reconoció que sí ha habido acercamientos y manifestaciones de la intención de apoyarlos por parte de las autoridades estatales, sin embargo, estos fueron en momentos anteriores a la pandemia y a la fecha no se ha concretado nada. Han recurrido a la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (SEDEA) para solicitar materiales necesarios para conservar los invernaderos, pero no han obtenido respuesta.
En cuanto al gobierno federal, refirió que “nuestras autoridades se han olvidado completamente de esta parte del campo, (…) a pesar de que vemos a nuestro presidente de la República anunciar apoyos directos para el campo, hasta ahora no hemos visto nada”.
Para los miembros de las comunidades que integran la organización, la producción agrícola es su principal sustento, además de que Hernández señaló: “nosotros somos un generador de empleos (…) la producción del tomate en el municipio es de algunos miles de toneladas en el ciclo largo”.
Asimismo, refirió que en su momento sostuvieron pláticas con el entonces delegado de la Secretaría de Bienestar, Gilberto Herrera, para exponerle sus propuestas y necesidades “pero no hizo nada el señor”, señaló.
Hernández expresó: “lo que más nos preocupa es el agua (..) el año pasado estuve acarreando pipas para mis viveros y comprar agua así no es nada sencillo ni rentable, pero lo hicimos para no dejar morir el cultivo”, y afirmó que todos los integrantes de la asociación se encuentran en la misma situación.