El alcohol no es un buen ingrediente para un evento deportivo, porque puede ser un detonante para la violencia, por lo que hay que solucionar los excesos que se dieron ese día en el estadio La Corregidora, entre ellos su venta o regulación; así lo afirmó Martín Lara Becerril, vocero de la Diócesi de Querétaro.
“El alcohol difícilmente se lleva con estos eventos porque sabemos que su consumo, en un grado alto en el cuerpo humano, deshinibe muchas cosas y al hacerlo muchas reacciones humanas suceden, y la consecuencia es la violencia”, indicó.
Consideró que se tienen que revisar los protocolos de venta en los eventos deportivos y, principalmente, en el estadio, pues aunque estará vetado por un tiempo, tendría que considerarse esta propuesta para evitar un crecimiento exponencial de la violencia y apelar al sentido familiar del deporte.
“Si queremos que un partido de futbol sea un espectáculo sano para la sociedad evidentemente que no tiene que haber este tipo de cosas. Si queremos que un partido de futbol sea un arte y que los jugadores muestren sus habilidades esto no cabe en una reunión así”, declaró.
Además del alcohol, añadió que el consumo de drogas también es un problema serio que debe ser atendido, pues es una situación que se ha hecho habitual, por lo que, dijo, hay que educar en la cultura de la paz para evitar “este tipo de excesos en los espectáculos”.
“Todos tenemos que aprender a vivir de otra manera y hay que solucionar lo excesos que se dieron ese día en el estadio, desde la venta de alcohol, la falta de controles de ingreso, la falta de seguridad y preparación de los responsables, cosas que se han dicho ya, hay que tenerlas en cuenta”, sostuvo.
Enfatizó en que la violencia es un tema complicado a nivel social, no solo en la entidad, sino en el país e incluso a nivel internacional; situación que “ningún ser humano quiere”, por lo que se deberán plantear nueva formas de educación a niños y jóvenes basada en el respeto y la tolerancia.
“Es un rechazo total a la violencia y a la persona violenta. Ciertamente, en lo que vivimos la semana pasada, son imágenes que nos llenaron de conmoción y saber que fue nuestro Querétaro son cosas que nos avergüenzan. Es nuestra gente, nuestros jóvenes, hijos de nuestras familias los que provocaron eso”, concluyó.