La Cámara Nacional de Desarrolladores y Promotores de Vivienda (CANADEVI), hizo un llamado a las autoridades federales y legisladores para reconsiderar la eliminación del Programa de Acceso al Financiamiento para Soluciones Habitacionales, y con ello evitar la eliminación de recursos específicos para apoyar a familias de bajos ingresos en la compra de una vivienda.
Para CANADEVI esta medida no sólo perjudicará a la población que menos gana (aproximadamente un 70 % de la población mexicana) al imposibilitar la adquisición de una vivienda, sino que podría traer riesgos en el sector, lo que impactaría considerablemente en la economía.
“Reconocemos que el subsidio es un mecanismo fundamental para que las familias de menores ingresos puedan comprar una casa”.
Es por eso que los desarrolladores de vivienda de este país, responsables de la construcción del 85 % de la vivienda social dirigida a los mexicanos que ganan entre tres mil y ocho mil pesos mensuales, nos manifestamos con profunda preocupación porque el presupuesto propuesto para el otorgamiento de subsidios dentro del Presupuesto de Egresos de la Federación 2019 es inexistente, al eliminar el Programa de Financiamiento para Soluciones Habitacionales, lo que propiciará una profunda crisis habitacional y laboral entre los mexicanos más necesitados, tanto de vivienda como de trabajo”, puntualiza CANADEVI a través de un comunicado de prensa.
Puntualiza que la vivienda social depende del apoyo del gobierno federal y sin esta inversión semilla, el 70 % de los mexicanos que forman parte de la economía formal y contribuyen con sus impuestos en la activación de la economía de México, verán cancelado su derecho constitucional a una vivienda digna y accesible en el 2019.
Por otro lado, contar con recursos que permitan desplazar las viviendas, detendría el dinamismo en el sector, uno de los más importantes en el desarrollo del país. Es por ello que consideramos sumamente arriesgado restringir la inversión en un sector que se caracteriza por fomentar proyectos de inversión integrales y apoyar la política social.
Por último, remarcan el llamado a los legisladores federales para que reconsideren la asignación suficiente de recursos con la intención de dar salida a las viviendas en proceso y con solicitudes de compra por parte de los derechohabientes. Esto permitirá evitar una crisis del sector que representa el 6 % del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, que genera más de tres millones de empleos y que impacta a 37 de las 42 industrias, así como a los bancos que fondean nuestros proyectos y a millones de trabajadores que perderían su empleo al dedicarse a la edificación de las viviendas, pero sobre todo, permitiría atender y proteger a las familias mexicanas más necesitadas.