Irregularidades, prácticas antidemocráticas, disturbios, acarreos, inducción al voto, violaciones a los derechos ciudadanos, esos son los sinónimos que hoy visten a MORENA, lo que representa una fuerza política integrado por ex militantes de todos colores y prácticas que creíamos se habían quedado atrás, prácticas que ellos mismos siguen criticando.
Durante años anteriores hemos escuchado el lema “La Esperanza de México”, pero que esperanza puede existir cuando se ejecutan acciones que rompen el esquema de la libertad democrática, cuando se condiciona el voto, cuando los actores políticos siguen orquestando todo para mantener el poder que tanto repudian los morenistas, porque no son iguales, están demostrando que son peores y que los interés personales son mayores al de su militancia.
No podemos tapar el sol con el dedo y tampoco minimizar el intento de robo de urnas, compra de votos, amenazas y mala organización en los centros de votación de una elección que era completamente interna, donde además la división entre los propios militantes es evidente.
Está bien tener diferencias y alternancia, está bien diferir de opiniones, lo que no está permitido es que se rompan los derechos social democráticos de las y los mexicanos que simpatizan con una fuerza política, que se conviertan en lo que tanto critican.
Hoy el tiempo y México exige unión y un camino acordé a la realidad social y política que enfrentamos, necesitamos mejorar los procesos de democracia para que no existan situaciones que inhiban la participación de la población.
Es inaceptable que el fundador de un partido político en nuestro país minimice lo acontecido, reconozca y acepte que existieron anomalías y culpe a la inconformidad ciudadana este tipo de acciones. Seguimos minimizando temas importantes, seguimos permitiendo que la violación a las leyes sean aceptables, porque no hay sanciones.
Se habla de una participación de 2.5 millones de personas, quienes acudieron a más de 550 módulos de votación y si bien la autonomía de las fuerzas políticas son exclusivas, se vivieron diversas incidencias y no son números al aire, porque estos datos si los trae bien, porque son cifras que dieron a conocer a los medios de comunicación, a quienes tanto critican por la manera en la que informan.
Es momento de abrir los ojos y de cuestionarnos, si este tipo de jornadas nos esperan en el futuro; sí este tipo de acciones se podrán presentar en las elecciones del 2024; es este el tipo de democracia el que merecemos los mexicanos.
*Diputada federal PAN