Pasó la temporada de lluvias y ciclones y las presas del estado siguen prácticamente secas. Incluso, después de cinco meses de lluvias, están peor que en 2022, al registrar un almacenamiento promedio de apenas el 7.7% de sus principales presas.
Al 5 de noviembre de 2023, las cifras de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) revelaron que la presa de El Batán, en el municipio de Corregidora, presenta un 13% de almacenamiento, mientras que El Centenario en San Juan del Río alcanza el 5%.
Asimismo, La Llave en San Juan del Río y La Venta en Pedro Escobedo se sitúan en un preocupante 0%, mientras que la Constitución de 1917 en San Juan del Río, San Ildefonso en Amealco y Jalpan en Jalpan exhiben un 3% y un 30%, respectivamente.
Este panorama contrasta drásticamente con el mismo período del año anterior, reflejado al 3 de diciembre de 2022, donde el almacenamiento promedio era considerablemente más alto, alcanzando el 24.57%. En esa fecha, la presa de Jalpan, en el municipio de Jalpan de Serra, destacó con un 95%.
El embalse El Batán informó un nivel de almacenamiento del 19%, mientras que El Centenario registró un 21%. Por su parte, La Llave reportó un 11%, Constitución de 1917 presentó un 12%, San Ildefonso alcanzó el 14%, y La Venta se posicionó como la única presa completamente vacía, con un 0% en el nivel de almacenamiento.
La marcada disminución en el almacenamiento promedio, de 24.57% en 2022 a 7.7% en 2023, evidencia una crisis hídrica que podría tener repercusiones significativas en diversas áreas, desde el suministro de agua hasta la agricultura y el medio ambiente.
Según el Monitor de Sequía en México, la totalidad del territorio de la entidad experimenta algún grado de sequía, al 30 de noviembre de este año, con tres áreas enfrentando sequía severa, 10 con sequía extrema y cinco de ellas padeciendo sequía excepcional.
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Este escenario contrasta con el inicio del periodo de lluvias en 2023, cuando Querétaro informaba sobre un municipio inusualmente seco, seis más afectados por sequía moderada y otros 10 con sequía severa. Esta situación pone de manifiesto la gravedad de la escasez de agua en la entidad, ya que, incluso con precipitaciones, el estado experimentó un empeoramiento durante el periodo de lluvias.