Un promedio de 30 días es el periodo de tiempo que logra un joven en un empleo en el sector industrial, situación que lleva a las empresas a reportar altos índices de rotación de recurso humano afectando en consecuencia la productividad.
De acuerdo a un estudio realizado por el Centro de Investigación de la Universidad Autónoma de Querétaro a 400 jóvenes trabajadores operativos se advierte la necesidad de vinculación entre la empresa y los trabajadores a fin de favorecer la identificación con el centro de trabajo.
Al respecto Teresa Armengol, Consultora de Recursos Humanos de Out Helping, señaló que los jóvenes que nacieron de 1985 hacia adelante, conocidos como la generación milenials, son quienes presentan problemas de estabilidad en las empresas, pues advierten el empleo solo de manera temporal, pues su meta es contar con un negocio para atender a su familia.
En su opinión es necesario establecer estrategias para que los jóvenes permanezcan en las fuentes de trabajo, que sientan cierta pertenencia, incluso desde el reclutamiento.
“Ahorita las antigüedades promedio andan por debajo de los 45 días, si un trabajador supera los 90 días normalmente se queda, pero la mayor rotación se encuentra en los primeros 90 día y mucho más en los primeros 45 y son estos muchachos”, afirmó.
Ante estos periodos cortos en la permanencia de empleos, informó que las empresas están siendo obligadas a la contratación diaria, por lo que señaló que de no tomarse medidas, la situación podría generar mayores problemas en la calidad y en la producción.