El secretario de Educación, Alfredo Botello Montes compartió que se trabaja en una política pública de educación inclusiva en la que se incluye la dimensión cultural.
Para ello, el secretario compartió que se han llevado a cabo diferentes talleres para docentes de los diferentes niveles educativos, con el objetivo de brindar herramientas al personal, que le permita generar condiciones de una educación inclusiva en el aula.
Explicó, Botello Montes que se desarrollaron tres talleres para educación básica, preescolar, primaria y secundaria; dos para educación media superior y dos para educación superior.
Además, talleres por tipo de discapacidad y trastorno, con el objetivo de favorecer la concientización de los docentes sobre la inclusión en el aula de estudiantes con algún tipo de discapacidad, que les permita conocerlas y generar sistemas de apoyo adecuadas, tales como: Discapacidad visual, auditiva, intelectual, física, espectro autista, déficit de atención e hiperactividad.
Botello Montes agregó que también ya se dieron a conocer los trabajo de la Comisión de Educación, integrada por académicos de diferentes instituciones públicas y privadas, que se desarrollaron como parte del Plan de Trabajo de la Comisión de Educación del 2019.
“Se discutió el documento que recopila las consideraciones teóricas, en la que se define el campo de estudio referente a la educación inclusiva, así como los conceptos relevantes, que abarca desde la normatividad internacional, nacional y estatal, un marco conceptual y algunas consideraciones de la Educación Inclusiva por nivel educativo”.
El secretario compartió que también se llevó a cabo un diagnóstico de la educación inclusiva en el estado, en el que se contó con la asesoría del INEGI, con la aplicación de una encuesta que permite conocer las condiciones de inclusión en el sector educativo, tanto en el ámbito público y privado de los niveles básicos, media superior y superior.
Respecto a la dimensión cultural, Alfredo Botello comentó que se debe fortalecer la colaboración y convivencia entre todos los miembros de la comunidad educativa a través del reconocimiento de la dignidad de la persona humana, como principio fundamental e implementar estrategias de sensibilización y concientización para generar culturas y prácticas inclusivas.
“En la cuestión política ya contamos con documentos base, que tienen como finalidad, dar orientación que permitan una mayor flexibilidad en el plan y programa para los alumnos con discapacidad o dificultades en el aprendizaje”.