La Secretaría de Movilidad de Querétaro asegura que los topes en las calles de la capital se colocan a petición ciudadana y después de un estudio para determinar la posibilidad de colocar un tope o reductor de velocidad.
Según la dependencia, una vez que llega la petición de colocar un tope se hace una visita al sitio para verificar las condiciones de la vialidad, donde se analiza el tipo de vialidad y el tipo y estado de la superficie de rodamiento.
Además, señala que se revisan las características de la zona, ya sea escolar o de hospital, así como el ancho del arroyo vehicular, la presencia de señalamientos de velocidad y de dispositivos de control de velocidad, como son los reductores.
Contrario a lo que se afirmó aquí por el Observatorio de Movilidad, de que hay exceso de topes y que son colocados sin criterio, la dependencia aseguró que también se realiza un estudio de velocidad de punto, implementado en un periodo valle del día, en el cual el volumen vehicular es menor que el promedio, y a través del cual, con el uso de pistolas de radar de radiofrecuencia, se registran 120 lecturas de velocidad a la que vehículos mixtos transitan en un periodo de dos horas por punto de interés.
Posteriormente, se vacían los datos recopilados y se verifica la velocidad a la cual transitan los vehículos, mediante la cual se establece el percentil 85 de cada muestra, la cual es considerada la velocidad representativa sobre la vialidad.
Si ésta es menor o igual a la velocidad máxima permitida, se toman medidas como reforzamiento del señalamiento vertical y horizontal; y si es mayor, se toman las mismas medidas, y se solicita la aplicación de dispositivos de velocidad segura.
En caso de ser necesario, se solicita a Obras Públicas la construcción de un reductor de velocidad acorde a las necesidades y características de la zona, y a la velocidad a la cual se debe transitar por la misma, a través de planos con especificaciones técnicas y constructivas del mismo.
Por último, asegura que una vez implementado el reductor de velocidad se realiza el pintado del mismo y la implementación de señalamiento preventivo a la distancia correspondiente, acorde a las características de operación de la vialidad y de la ubicación del nuevo reductor.