Las mujeres podrían considerarse como las grandes olvidadas de la historia. Querétaro se ha contado sin incluirlas o incluyéndolas muy poco. Ellas han estado ausentes en muchos ámbitos, por ello, como fotógrafos hicimos el ejercicio de tomar las estatuas o monumentos en donde aparecían ellas, y las borramos mediante photoshop para preguntarnos: ¿qué seríamos sin ellas?
La Corregidora
Una de las mujeres más fuertes de la historia de México. Su dura personalidad y cualidades la llevaron a ser una mujer adelantada a su tiempo. Fue ella quien forzó a que se concretara la “conspiración”, un levantamiento que luego dio origen a la independencia de México. Hubo muchas conspiraciones, pero la mayoría se abortaron y la que tuvo éxito finalmente fue la de Querétaro, y fue una mujer fue la clave: Josefa Ortiz de Domínguez.
Los Concheros
El Barrio de la Cruz es uno de los más tradicionales en la ciudad de Querétaro, y se caracteriza por continuar realizando actividades heredadas por sus primeros pobladores, como la de los “Concheros” en el mes de septiembre, un símbolo no sólo de este lugar, sino también de todo el territorio queretano. Son hombres y mujeres quienes realizan este ritual en conjunto.
Josefa Vergara
Después de la Corregidora, Josefa Vergara es la mujer más reconocida. Tuvo una vida ejemplar: nació pobre en 1747, se casó con un rico, se quedó viuda y, con todas las propiedades y toda la fortuna construida entre ambos. Para el final de sus días decidió que su riqueza sería destinada al servicio del pueblo queretano.
La mujer, evidentemente, merece un reconocimiento público. Su nombre debe aparecer en escuelas, hospicios, calles y hasta parques, su figura quizá también.
Monumento a la Autonomía
Luego del movimiento estudiantil de 1958, en busca de la autonomía, en 1959 la institución se transformo en Universidad Autónoma de Querétaro. La autonomía universitaria es un largo proceso histórico de lucha emprendida por estudiantes, maestros y autoridades universitarias, mujeres y hombres, en una lucha en conjunto.