La Diócesis de Querétaro no prohibirá el uso de la pirotecnia, vamos a seguir educando en el uso responsable de la misma, apuntó el vicario general de la iglesia queretana, Martín Lara Becerril, quien dijo que desde hace tres años se han impartido cursos a los encargados de las fiestas patronales para evitar accidentes como el ocurrido en Fuentezuelas el pasado 11 de diciembre.
En este sentido señaló que la prohibición de la pirotecnia es responsabilidad de las autoridades, por tanto a la iglesia católica solo le corresponde educar en el manejo de la misma, es por ello que en 2015 el obispo de la Diócesis de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, emitió un manual del uso de la pirotecnia para que tanto los comités y encargados de las fiestas patronales conozcan las especificaciones que deben considerar para tener celebraciones sin contratiempos.
“Prohibir nunca es un resultado seguro, por lo que nosotros hemos optado es por la educación y el uso responsable, esa es la opción que desde hace tres años lo hemos hecho de una manera constante, simplemente yo refiero este dato hay muchas voces que dice que se debe evitar el uso de la pirotecnia, pero esto será responsabilidad de las autoridades”, afirmó Martín Lara Becerril.
Detalló que dentro del manual, que lleva por título “La alegría de mi pueblo en fiesta. Uso responsable de la pirotecnia”, se ofrecen algunas disposiciones al respecto de esto, como la obtención de todos los permisos de autoridades municipales, visto bueno de protección civil, acatar con responsabilidad todas las indicaciones acerca del traslado y quema de material explosivo y la transportación de la misma bajo autorización de la autoridad.
Asimismo, Armendáriz Jiménez exhorta a que los comités y organizadores de las fiestas patronales en las comunidades, excluyan actitudes de competencia ante la quema de explosivos y que estos sean armados, trasladados y lanzados en sitios seguros alejados de la gente.
Sobre el caso del accidente de Fuentezuelas en el municipio de Tequisquiapan que ocurrió el pasado 11 de diciembre, el vocero de la Diócesis queretana mencionó que se trató de un accidente, toda vez que esta actividad la llevaban realizando desde hace muchos años sin ningún contratiempo, por tanto se trató de “una bomba” que no subió lo necesario para evitar caer en la pirotecnia que estaba cerca de las personas.
“Este barrio de Fuentezuelas por años habían hecho el mismo recorrido, nunca había pasado nada, se trata de un lamentable accidente, según los testigos refieren que una vez que la gente está formada para la ofrenda, lanzaron una bomba pero ese día la bomba no subió lo suficiente y las esquirlas cayeron en la pirotecnia”, concluyó.