El Grupo de Información en Reproducción Asistida (GIRE),Amnistía Internacional y 98 organizaciones más, pusieron enmarcha la campaña “Niñas, no madres”, en un esfuerzo porfrenar el embarazo adolescente en el país y en toda AméricaLatina.
Aunque Querétaro se ubica en el segundo lugar nacional conmenor tasa de fecundidad adolescente, sólo después de la Ciudadde México, se pretende llevar información a todo el país sobrela violencia sexual contra niñas menores de 15 años y la altatasa de embarazos en estos rangos de edad.
Durante el taller para periodistas “Los derechos humanos demujeres víctimas de violencia sexual”, la directora de GIRE,Regina Tamés, la consultora internacional en género y justicia,Julissa Mantilla y Juliana Cano, de Aministía Internacional,presentaron la campaña “Niñas, no madres”, que conjuntaesfuerzos de más de cien organizaciones defensoras de derechoshumanos.
La campaña pretende frenar el hecho de que América Latina esla única región del mundo donde aumentó el número de partos enniñas y México no es la excepción.
La directora general de IPAS México, Rafaella Schiavon señalóque el embarazo en adolescentes “es la punta del iceberg” deuna suma de condiciones sociales, económicas, educativas,comunitarias y familiares que afecta a las niñas yadolescentes.
El promedio nacional registra 77 madres adolescentes por cadamil jóvenes en el 2014, cifra que se igualó a la hace 20 años,lo que se atribuye a la falta de información y de métodosanticonceptivos, entre otros factores.
En ese escenario nacional, Coahuila ocupa el primer lugar conuna tasa de 113 madres adolescentes por cada mil jóvenes, contrael Distrito Federal que ocupa el último lugar nacional en la tasade fecundidad en adolescentes y el penúltimo lugar que tieneQuerétaro, con sólo 52 embarazos por cada mil adolescentes.
Se estima que el 40 por ciento de las adolescentes de AméricaLatina ha sido abusada sexualmente. En los últimos seis años seregistraron más de 28 mil denuncias por violación sexual a niñasmenores de 15 años en el país y sólo a dos mil 419 de ellas,poco más del ocho por ciento, se les ofreció anticoncepción deemergencia.
Estas agresiones sexuales que generan un embarazo forzado secomplican si además existe una maternidad forzada, en la que sepone en juego la vida de las niñas y las adolescentes, por lo queuna de las demandas es el aborto seguro, que se garantiza con laNorma Oficial Mexicana 046, que permite la interrupción delembarazo en niñas mayores de 12 años víctimas de agresiónsexual y sin necesidad de que medie una denuncia porviolación.
Aunque la norma se aprobó desde marzo de este año, hasta elmomento ningún hospital público del país realizó un abortolegal con base en la NOM 046.
Al respecto, Regina Tamés denunció que existen grupos dederecha que suelen acercarse a las mujeres, principalmente cuandoson menores de edad, para persuadirlas de no abortar y eso se sumaa la actitud del personal del sector salud que es renuente apracticar un aborto.
La campaña “Niñas, no madres” pretende difundir lainformación sobre el derecho de las niñas de vivir sin laobligación de la maternidad forzada y a recibir el debido cuidadoque proteja su vida.
