La ciudad de Querétaro bajó un lugar en el Índice de Competitividad Urbana 2022, y se ubicó en el cuarto lugar a nivel nacional; aunque, es la tercera ciudad con más de un millón de habitantes en la que más de la mitad de los habitantes se sienten seguros, de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
El IMCO, ubicó a la capital del estado en un nivel alto de competitividad, aunque en 2021 estaba en el tercer lugar, sólo por debajo de las ciudades como Monterrey, Saltillo y Guadalajara, que tienen más de un millón de habitantes.
Por rubros, Querétaro tiene un nivel medio bajo en competitividad en medio ambiente, mientras que, en derecho, sociedad, gobiernos, precursores, y relaciones internacionales son un nivel medio alto; mientras que en mercado de factores, economía e innovación tiene un nivel ato. Y en sistema político su nivel de competitividad es alto.
Además, en el único sub eje en el que tiene baja o media baja competitividad es en el sistema de derecho confiable y objetivo, debido a que en robo de vehículos tienen una cifra de 6.6 robo de unidades por cada mil vehículos registrados, lo que la ubica en la posición 62 de 66 ciudades. Y en secuestro tienen registrados 0.5 por secuestros por cada 100 mil habitantes.
Mientras que, en sociedad incluyente, preparada y sana, cuenta con un nivel alto de cobertura educativa con el 69.2% de población de 0 a 14 años, y también en nivel alto de competitividad porque sólo el 0.7% de las personas económicamente activas están por debajo de la línea de bienestar.
La ciudad de San Juan del Río también aparece en dicho ranking, pero este año en el lugar número 14 en el rango de las ciudades de 250 a 500 mil habitantes, con un nivel medio bajo de competitividad.
Respecto a esta ciudad los indicadores con competitividad muy baja son secuestro, debido a que reportan 1 secuestro por cada 100 mil habitantes, y en nivel bajo de competitividad por robo a vehículos, por 6.2% de robo a vehículos por cada mil vehículos registrados.
Y en gobiernos eficientes y eficaces hay un nivel alto de competitividad, debido a que el 46.1% de sus ingresos son propios, y también en el sistema de alertas cuentan con un nivel alto.
Ante estas cifras, el IMCO propone la coordinación entre el sector privado, academia, y estados; además de la inversión en infraestructura para resolver más de un problema, así como el uso de herramientas electrónicas para ser más eficientes.