El semáforo epidemiológico de los municipios del estado que elabora la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) ubicó a la capital en semáforo rojo, en segundo lugar, a Corregidora, por el acelerado incremento de contagios de Covid-19 durante la última semana, ante lo que Teresa García Gasca, rectora de la casa de estudios, refirió que “no estamos en una situación crítica, pero estas son alarmas rojas que ya nos indican que debemos tener todos los cuidados necesarios”.
La variante Delta que de la que ya existe presencia en el estado resulta de preocupación porque presenta un potencial de infección dos veces y medio más alto al del virus original; en segundo, la variante Gamma, es dos veces este registro es el más elevado, comparado con las variantes Alpha y Beta, registradas en Sudáfrica, y en Inglaterra, que son 1.5 veces más infecciosas.
“Esta variante delta es capaz de infectar con más éxito a grupos etarios menores, con más posibilidades de agravar, (…) por eso es importante que cuidemos todos los detalles con respecto a nuestro cuidado personal para evitar contagiarnos y en caso de que sea así, acudir a los primeros síntomas a los servicios médicos.”
Respecto a la presencia de variantes del virus SARS-CoV2, manifestó que “es un proceso natural, de cualquier infección viral. No debemos entrar en pánico, pero sí debemos ser cuidadosos porque lo novedoso no es que haya variantes, sino que este virus tiene ciertas características que nos ha costado mucho trabajo controlar”.
García Gasca hizo la diferencia entre el estar infectado y el estar enfermo, lo que radica en el desarrollo o no de los síntomas característicos del padecimiento, “puedes, incluso, no enterarte de estar contagiado, pero sí lo puedes diseminar, por eso la importancia de continuar con los cuidados que ya conocemos”.
Las mutaciones tienen que ver con el tamaño del genoma y con la rapidez con la que se replica ese ser vivo, debido al tamaño del genoma es que es más posible que se den mutaciones, por eso es más probable que un ser vivo como un virus mute en poco tiempo, a que mute un ser humano completo, pues es un organismo mucho más complejo al que como especie le ha tomado cientos de años evolucionar.
En México existe un Consorcio Mexicano de Vigilancia Genómica que es apoyado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) y por el gobierno de la Ciudad de México, y tres universidades. Este organismo registra cuáles son las variantes de preocupación, luego, las de interés que pudieran generar alguna variante exitosa, y luego están las de monitoreo, para analizarlas a través de estudios epidemiológicos.
Según la clasificación de regiones del consorcio mexicano de vigilancia, Querétaro se ubica en la región del centro-norte del país, donde los registros de casos de la variante Delta apenas se notan, por lo que la rectora consideró que “estamos muy a tiempo de generar estrategias para que el efecto sea lo menos grave posible dada la capacidad infecciosa de Delta”.