Querétaro no firmó el convenio para adherirse al Instituto Nacional de Salud para el Bienestar, ya que era entregarle toda la infraestructura al gobierno federal, confirmó el gobernador, Francisco Domínguez Servién.
Señaló que es de los ocho estados que estarán como no adheridos al INSABI, y esta acción no es un capricho o es algo político, ya que desde el inicio fue una opción que dio el gobierno federal.
“Si ustedes revisan era entregarle todo al gobierno federal, incluyendo la infraestructura de hospitales, de clínicas”, indicó.
Aclaró que aunque será responsabilidad del gobierno estatal el sistema de salud estatal, los recursos serán del gobierno federal.
Puntualizó que el gobierno del estado cuenta con la infraestructura para brindar los servicios de salud a los usuarios, y el sistema de salud local es considerado el mejor y más “sano” de todo el país.
“Toda la capacidad la tiene el estado, el estado le invierte mil 200 millones de pesos anuales en favor de la salud”, indicó.
Recalcó que contrario a lo que ha sucedido en otras entidades con problemas de medicamentos y atención médica, Querétaro no tiene esta problemática.
PROPUESTA
El secretario de Salud, Julio Cesar Ramírez Argüello refirió que propondrán a la federación que con recursos por entre 300 y 350 millones de pesos extras que destine la federación o el gobierno estatal, los pacientes también puedan acceder a los servicios de tercer nivel en la entidad.
“Si en un dado momento la federación no nos lo da, pues nosotros obviamente como estado mandar a esos pacientes de atención para que se puedan atender allá (Ciudad de México)”, indicó.
Sin embargo, aseguró que buscan que los pacientes sean tratados en la entidad para que no gasten en los traslados y eviten llegar a nosocomios en los que tarden más en darles atención.
Mientras tanto, refirió que los servicios de salud de primer y segundo nivel continuarán brindándose de manera gratuita, menos los de tercer nivel.