Brujos y curanderos rechazan la pretensión del gobierno federal de ingresarlos al Servicio de Administración Tributaria (SAT), al afirmar que con el pago de impuestos sus ingresos bajarían considerablemente, en un negocio donde tampoco se gana lo suficiente para vivir.
De acuerdo con curanderos del barrio de San Francisquito, el hecho de que los servicios que ofrecen puedan facturarse sólo genera mayores complicaciones a las personas dedicadas a ello, puesto que, dijeron, nadie en ese tipo de negocio solicita factura y lo poco que ingresan lo perderán en impuestos.
Y es que, cabe señalar que el SAT agregó a su catálogo de productos y servicios trabajos como la hechicería y las limpias energéticas para facturar, incluídos en la categoría de salud, en el grupo de medicina alternativa.
En ese sentido, las personas que se dedican a hacer limpias, amarres, hechizos o aplican algún tipo de práctica relacionada a la medicina alternativa deberán darse de alta ante el SAT. La idea es que a partir de sus ingresos pagarán impuestos como el IVA y el ISR.
"No es que estemos en contra de pagar impuestos, pero imagínese, no ganamos mucho de esto y luego tenemos que registrarnos y hacer facturas y cosas que ni siquiera entiendo, pues como que no. Al rato voy a tener que pagar contador y luego pagar los impuestos y de lo poquito que sale pues ya mejor que se lo queden todo", indicó Don Chayo, curandero de la calle 21 de Marzo.
El ingreso por cada servicio varía dependiendo lo que se pida, pero un amarre, por ejemplo, oscila entre los 150 y 200 pesos, mientras que otro tipo de servicios, como el mal de ojo, van de los 200 a los 250 pesos, siendo muy pocos los que se solicitan, debido a la baja en sus servicios.
"Desde hace como cinco años ha bajado mucho el trabajo. Yo sólo vivo de esto, que cura al niño, que aquello, he de tener como mil 500 a la semana, aparte recolecto pet. Imagínate si apenas gano eso y luego me quieren quitar más, si ya pagamos luz, agua. No fueran los que tienen dinero porque a ellos ni impuestos les cobran".
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Para él, como para otras personas dedicadas a lo mismo, no les parece justo que "quieran sacar dinero" a personas cuyo ingreso es bajo, puesto que les afectaría directamente a su vida diaria: "nos quieren dejar sin comer, pero con los impuestos bien pagados para que sigan haciendo nada con ese dinero. Mejor que nos lo dejen y ya", concluyó Don Chayo.