Es necesario blindar la operación de los clústeres estratégicos del estado de Querétaro, (aeronáutico, automotriz, de Tecnologías de la Información, Médico, de Energía, Plásticos, Logístico y Biotecnológico) con una ley, en la que además se plantee un fideicomiso dirigido por la iniciativa privada para apoyar a los proyectos de las empresas y emprendedores, en el que participen recursos de las empresas, el sector público y la academia.

Así lo expuso el director de Vórtice IT, Bernardo Buitrón Rosainz, al citar que la estrategia económica del estado se ha desarrollado en organizar a los diferentes sectores en clústeres para vincular a las empresas, academia y sector público, con el objetivo de promover mayor crecimiento.

Dijo que es importante que la operación del sistema de clusterización del estado se fortalezca a través de una legislación que garantice la operación no sólo de estos organismos, sino que funja como una plataforma para las empresas que los conforman.

En la reunión con especialistas, académicos, empresarios y legisladores como parte de los trabajos alrededor del “Conversatorio para el Análisis del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación”, el director del Clúster de Plásticos, Miguel Ángel Aguirre Hernández, coincidió en la creación de un fideicomiso que apoye a los nuevos empresarios y emprendedores.

Asimismo y tras las mesas de análisis y la participación virtual en el conservatorio, organizado por la Cámara de diputados federal, el Foro Consultivo Científico y Tecnológico y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología Paloma Arce Islas, diputada local por Morena y presidenta de la Comisión de Ciencia, Tecnología e Innovación en la LIX Legislatura de Querétaro, expuso que hay déficit en inversión privada en ciencia tecnología, por lo que es necesario generar estrategias que estimulen la participación del sector empresarial para afrontar la responsabilidad de forma conjunta con el estado.

En este sentido propuso que el 1% de las ventas de las empresas sea destinado a actividades de ciencia, tecnología e innovación a través de estímulos fiscales, o bien hacer deducible la aportación que se realice para que se traduzca en un beneficio para los empresarios, pero también para el estado.

Además de que las compras realizadas por el estado sean a empresarios locales que tengan la capacidad para hacerlo, a fín de impulsar la economía local y un punto más enfocado a descentralizar la ciencia y tecnología; es decir, invertir en los estados para que las diferentes regiones tengan el mismo impulso.