La Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos, CROC, recuperará los inmuebles que fueron entregados a la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México, CATEM por el exdirigente, Antonio Castelán, pues son propiedad de los trabajadores y no de un particular.
El inmueble donde la CROC tenía su sede en la colonia Palmas ahora funge como oficinas de la CATEM, misma situación que sucedió con la CTM cuando el ex dirigente Jesús Llamas se apropió de un auditorio.
"Tenemos conocimiento en algo y creo que van a hacer lo conducente, van a ver que lo que es de la CROC, es de los trabajadores, no es personal de nadie, todo es los trabajadores".
Sin revelar detalles del proceso legal que se encierra actualmente con los bienes, aseguró que los expedientes y denuncias continúan abiertas y en seguimiento.
Recordó que los bienes de cualquier central obrera, no solo de la CROC, son de quienes realizan las aportaciones, las bases trabajadoras, por lo que para enajenar o arrendar es necesario un proceso a nivel nacional, por lo que el uso inadecuado de las instalaciones de la colonia Palmas es un delito.
"Lo que compra o adquiere es de los trabajadores, lo que se compra o adquiere con las aportaciones y con ese derecho van a ver cómo está la situación y lo que corresponda a la CROC estamos con la idea de reclamarles para que sea parte nuevamente", finalizó.